Reclamo en educación por precarización laboral

Trabajadores de ATE manifestaron esta mañana en la sede del Ministerio de Educación de la avenida Hipólito Yrigoyen, en reclamo de que se resuelva la situación de cerca de 3000 docentes y capacitadores afiliados ese sindicato que no cobran desde hace al menos cuatro meses.

“Es lamentable que tengamos que llegar a estas circunstancias. Presentamos una nota y no tuvimos ningún tipo de respuestas”, dijo a El Submarino Radio (91.5) Matías Brizuela, titular de la Asociación de Trabajadores del Estado (ATE) y recordó: “La única reunión que tuvimos fue en marzo del año pasado, y en esa oportunidad la ministra dijo que no iba a dar continuidad a los compañeros porque son afiliados a ATE. Nosotros insistimos y logramos romper esa decisión, pero hoy continúa con esas resoluciones, y se profundiza”.

“Ayer dieron la noticia de que van a cobrar el 1° de julio, y eso es verdaderamente una vergüenza, porque estos trabajadores deberían haber cobrado hace cuatro meses, señaló.

Explicó que muchos de estos trabajadores están en condiciones de pasar a planta permanente, “pero se sigue jugando con la decisión de tenerlos precarizados”, afirmó.

La única respuesta que obtuvieron en esta jornada de protesta, que incluyó un paro de 24 horas de todos los trabajadores de ATE, fue de parte del secretario de la ministra, que les dijo a los delegados que los recibiría los próximos días. “Nosotros pedimos una nota por escrito con el compromiso de recibirnos mañana o el lunes, porque ya conocemos las maniobras y el manoseo”, comentó Brizuela.

Se trata de más de 3 mil trabajadores, inscriptos como transitorios, que ya deberían haber pasado a planta permanente. Algunos de ellos, trabajando con contratos de locación de servicios desde hace cinco años.

“Vivimos la discriminación hacia nuestro sector sindical –denunció Brizuela-. Vimos resoluciones que se firmaron en favor de otras entidades gremiales y otras organizaciones, pero nos discriminan a los que no tenemos acuerdos políticos partidarios ni ningún interés de acompañar a Cambiemos”.

Si bien este es el reclamo central de la jornada de paro de ATE, en otros puntos de la provincia la protesta se centró en los problemas de cada localidad. En La Quiaca, por ejemplo, reclamaron el pago de zona desfavorable, y en otros lugares se sumaron demandas por condiciones de trabajo, falta de ropa de trabajo y persecución gremial. “Hay compañeros del interior a los que los desaprobaron por el solo hecho de pertenecer a una organización sindical”, aseguró Brizuela.

“El trabajador no llega a fin de mes ni a cubrir las necesidades de su familia, y mientras tanto siguen las amenazas y aprietes. Si el paro no tiene alto acatamiento es porque los compañeros son perseguidos y les comen la cabeza para que no salgan a pelear”, agregó.

El gran reclamo, por supuesto, es porque se retome la discusión salarial. La última convocatoria del gobierno es para el próximo miércoles, con el conjunto de los gremios estatales nucleados en el Frente Amplio Gremial. “Esperamos que sumen lo que marca la realidad, porque plata hay, pero se distribuye mal”, comentó el sindicalista.