Los abogados Marcos Aldazabal, Luis Paz y Eduardo Tavani presentaron una denuncia ante el Consejo de la Magistratura de la Nación contra los jueces federales Mario Héctor Juárez Almaráz, Alejandra Cataldi y Liliana Snopek por su mal desempeño de sus funciones en la conocida como “causa de los huevos”.
En ella está imputada la dirigente social, Milagro Sala por una protesta que ocurrió hace 12 años, en la que no estuvo, y sólo fue mencionada por un testigo que mintió y quedó probado que trabajaba para el gobierno de Gerardo Morales, de apellido Arellano
La denuncia de los abogados, se basa en que los tres jueces resolvieron en esa causa en contra de lo que manda la ley y toda la jurisprudencia de la Corte Suprema de Justicia, con la única finalidad de perjudicar a Milagro Sala, con tan torpe decisión.
Cabe destacar que la defensa de Sala, en este juicio de por sí escandaloso, planteó con irrefutables argumentos la prescripción de la acción penal por el transcurso del tiempo.
La inacción en la causa era manifiesta y declararla extinta, como cabía, era una obligación de los jueces. Porque no hacerlo, resultaría una vulneración grave del derecho de la imputada.
La misma Corte Suprema reconoció expresamente que apartarse de las normas que rigen el instituto de la prescripción, sería un verdadero alzamiento contra su autoridad, la de la Corte.
Alzamiento que los jueces Juárez Almaráz, Cataldi y Snopek, no dudaron en concretar con su mal desempeño. Por eso han sido denunciados por ante el Consejo de la Magistratura, pues al resolver como lo hicieron, contrariaron la ley y se alzaron contra el Máximo Tribunal Federal.
Por más de tres años esos jueces no hicieron nada en dicha causa, la dejaron dormida. Y tras el planteo de prescripción por el transcurso del tiempo interpuesto por la defensa de Milagro, sin sonrojarse siquiera, dispusieron su rechazo.
Para eso se valieron de argumentos venales. Pero peor aún, lo hicieron en tiempo récord, convocando a una audiencia imprevista con escasas 48 horas de plazo, a pesar de conocer de antemano que la defensa de Sala no se encontraba en Jujuy por entonces y a sabiendas de que dos días (48h), era un plazo más que exiguo para ejercer cualquier defensa.
Por si ello fuese poco, también decidieron ignorar la existencia de cuestiones previas de resolución en instancias superiores, lo que debió haber impedido que se llevase a cabo la audiencia en cuestión. Sin embargo, no titubearon, siguieron adelante, sin inmutarse, avanzaron con la audiencia, y materializaron una nueva infamia.
Esos jueces, ahora denunciados, no permitieron siquiera a los abogados de la defensa tomar la palabra, con lo que Sala; López y Salvatierra (los tres imputados), quedaron en estado de completa indefensión.
Para peor, en esa misma audiencia, el juez Juárez Almaraz, se animó impunemente a adelantar con toda temeridad su voto condenatorio, en una causa en la que los imputados podrían ser lógicamente absueltos, si en realidad primase el derecho y la justicia, ausentes en Jujuy desde diciembre del 2015.
Ahora sólo queda esperar que el Consejo acoja la fundada y congruente denuncia contra los tres magistrados y le dé curso, respetando –desde ya- su supremo derecho de defensa e investigue el caso por la gravedad que tiene, tras lo cual es de esperar que Juárez Almaráz, Cataldi y Snopek, sean separados de sus cargos, por la causal de mal desempeño, más allá de las ulteriores acciones que pudieran corresponderles por la comisión de delitos tipificados en el Código Penal”.