En el marco de la crisis en el sector científico y tecnológico nacional, un director miembro Conicet presentó su renuncia y denunció «persecución ideológica». Se trata de Manuel García Solá, ex ministro de Educación de Carlos Menem.
García Solá era miembro del Directorio del Consejo Nacional de Investigaciones Científicas y Técnicas (Conicet), cargo que compartía con Roberto Rivarola, Mario Pecheny, María Laura Correa, Luz Lardone y Jorge Aliaga. La carta que presentó ante Nicolás Pino, presidente de la Sociedad Rural Argentina, es en respuesta a la solicitud que Pino le realizó a principio de mes.
En la renuncia, García Solá expresó «en la historia reciente de la Humanidad, jamás se alcanzó la libertad económica, en la que coincidimos y por la que bregamos en la SRA, sin libertad política, libertad de pensamiento y disenso democrático, sin respeto a las ideas del otro, sin tolerancia y sin justicia en la distribución de los bienes».
En el texto cita un artículo del reglamento del directorio del Conicet, que establece que sus miembros «actuarán con independencia de criterio y no en representación de sus proponentes». En ese sentido, García Solá afirma que «eso es lo que se hace en ese Directorio: Política científica y tecnológica del más alto nivel».
Y luego agrega: «Nunca podría callar mi voz cuando se intentara cometer algún acto de persecución por ideas científicas, políticas, religiosas, tecnológicas o las que fueran».
Más adelante lamenta no haber podido cumplir con su objetivo de profundizar la transferencia de tecnología desarrollada en el Conicet al sector agropecuario y sus empresas, porque «el cambio de Gobierno del año pasado y de políticas en materia científica y tecnológica, lo truncaron».
Desde la Red de Autoridades de Institutos de Ciencia y Tecnología (Raicyt) emitieron un comunicado donde denuncian que «García Solá, representante del Agro, se va, denunciando persecución ideológica en el Conicet, impulsada por el Poder Ejecutivo de la Nación».
«No nos da lo mismo, no queremos un país con caza de brujas, nada es posible cuando el Estado Nacional, que debería velar por los intereses de su población, se persigue a quien piensa distinto», añadieron.
Ola de renuncias en el Conicet
Científicos del Conicet advierten que la baja de 240 becas doctorales y posdoctorales de jóvenes investigadores perjudica al «semillero de ciencia» argentina, lo que sumado a una «ola de renuncias» por bajos sueldos y falta de presupuesto genera una «situación de éxodo científico que ya es masivo».
«Son 240 jóvenes investigadores que venían trabajando desde hace seis o siete años. Son todos profesionales ya recibidos y estaban esperando una decisión a ver si podían ingresar a la carrera de investigador del Conicet porque se habían presentado al concurso», explicó el inmunólogo e investigador Jorge Geffner.
En diálogo con Bien de Domingo por C5N, señaló que «algunos entrarían y otros no, por falta de mérito», pero «la tradición en el Conicet es que a toda esta gente joven, que es el semillero de ciencia que tenemos en Argentina, se le prolonga la beca hasta tanto se decida el ingreso o no ingreso. Y ahora se cortó abruptamente», denunció.
Geffner remarcó que esta situación se da en un «marco muy preocupante» porque «está bloqueado el ingreso a las carreras en el Conicet». «La gente se jubila y tenemos una muy importante ola de renuncias por dos motivos: primero, porque los sueldos son bajísimos; y segundo, porque no hay un peso para trabajar», afirmó.