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A pesar de la economía «crítica», el gobierno de Jujuy no evalúa pedir aportes a ingenios ni mineras 

A pesar de trazar un panorama económico provincial que calificó como «crítico», el ministro de Hacienda, Carlos Sadir, afirmó que no está en estudio imponer ningún tipo de aporte extraordinario a los ingenios y mineras, que no suspendieron sus actividades productivas en la pandemia.

Sadir brindó una conferencia de prensa en la que describió la situación económica y financiera de la provincia como muy crítica, debido sobre todo a un «marcado descenso» en la recaudación y en la distribución de los recursos de coparticipación, en relación a lo presupuestado. «Vamos a tener una merma de recaudación, solo en coparticipación, de 9000 millones de pesos», precisó el ministro.

Si bien esta descripción se corresponde con la realidad que atraviesa no solo la provincia sino el conjunto del país, lo cierto es que los principales sectores productivos de Jujuy no han suspendido las actividades. Es el caso de los ingenios -Ledesma, Río Grande, La Esperanza- y las empresas mineras, por ejemplo, todos exceptuados de la cuarentena. Sin embargo, Sadir cerró toda posibilidad de que estos sectores puedan contribuir a la prevención y atención de la pandemia.

Consultado por El Submarino Diario sobre la posibilidad de que el gobierno implemente algún tipo de tributo o aporte extraordinario para estas actividades, el ministro afirmó: «No, no tenemos previstos nuevos impuestos. Es verdad que son actividades que no pararon, y que son muy representativas de la provincia y sabemos que tienen un potencial de venta y de recaudación importantes. Pero en verdad no tenemos pensado ningún tipo de incremento o modificaciones impositivas».

Hasta ahora, la ayuda a Jujuy del gobierno nacional a través de los ATN sumó 1.250 millones de pesos, enviados entre enero y julio, lo que, según el funcionario, «no compensa la enorme caída de la coparticipación». Así es como «se está haciendo un ahorro importante en algunos conceptos», indicó, y mencionó como ejemplo la obra pública, el abono docente, el BEGU y eventos en turismo y cultura que estaban presupuestados y quedaron suspendidos.

En este marco, la provincia está «haciendo un esfuerzo» para llevar adelante el pago de los haberes, aplicando recursos a los gastos generados por la pandemia y buscando cómo destinar fondos a subsidios y ayudas a comercios y otras actividades que están sin trabajar.

«Sabemos que esa ayuda no alcanza», admitió Sadir, y adelantó que están «estudiando la modalidad y los parámetros» de otras líneas de apoyo, aunque remarcó que los sueldos estatales y los gastos por la pandemia son las prioridades.

La atención y prevención del coronavirus implicó hasta ahora un gasto de 500 millones de pesos, según precisó el ministro. Aunque ese no es el total, porque hay otros «recursos específicos que llegan directamente al área de Salud, que maneja el ministerio y no entran en Rentas Generales».

Deudas

Al 31 de junio, el stock de la provincia asciende a 60.000 millones de pesos, algo más de 800 millones de dólares. De este total, 540 millones de dólares corresponden a Cauchari.

Hay además «dos importantes endeudamientos con Nación, que son las refinanciaciones a través de una adenda a lo que venía del Consenso Fiscal, que son 8.830 millones, y los fondos fiduciarios de 8.133 millones», precisó la secretaria de Ingresos Públicos, María Agostini.

Del total de deuda, el 65% es en moneda extranjera.

A pesar de que la Legislatura autorizó al Ejecutivo a endeudarse con Nación por 6000 millones de pesos, hasta ahora se firmaron solamente 2500, de los cuales faltan llegar 1250. «Nos van a faltar recursos para financiar la segunda mitad del año», advirtió.

Por otro lado, la provincia tiene ya gestionado un crédito con el Banco Macro que todavía no tomó. «Estamos viendo, nos falta pagar muchos meses de sueldo y el aguinaldo de fin de año, y hay que ver cómo va la recaudación», detalló.

Respecto de la reestructuración de la deuda ya tomada por la provincia, el secretario de Egresos Públicos, Fortunato Daer, explicó: «La provincia está pensando en abrir las conversaciones con cinco o seis bonistas, aprovechando que la Nación está negociando; pero no estamos en condiciones de brindar detalles».

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