Por Movimiento Político Social y Cultural de Asambleas Resistiendo con Aguante. A los organismos de derechos humanos, en particular a las Abuelas de Plaza de Mayo y Madres de Plaza de Mayo Línea Fundadora. Queridas compañeras: Ustedes que opusieron al terror, el amor, nos han construido esta sociedad.
Esto que somos se lo debemos a ustedes, a sus hijos y a sus nietos y llegamos hasta aquí de la mano de los treinta mil.
Treinta mil. Ni uno más. Ni uno menos.
Ellos nos pusieron en este lugar y estamos dispuestos a honrarlo.
Ellos, los treinta mil, accionaron las alarmas, leyeron las señales y nos enseñaron a leerlas. Es por ellos que conocemos al enemigo.
Un enemigo que es especialista en la negación y al que no le vamos a permitir que vuelva a decir: “no están, no están ni muertos ni vivos” porque acá estamos y somos el eco infinito de sus treinta mil voces infalibles.
Nuestros treinta mil desaparecidos fueron los “derechos”.
Nuestros treinta mil desaparecidos fueron los “humanos”.
En su carne tibia vibró el deseo de una sociedad más justa y esa vibración nos habita.
Treinta mil rostros, treinta mil historias, treinta mil nombres que los buscarán por siempre, nos enseñaron a reconocer las múltiples máscaras del enemigo que hoy se esconde en burdas campañas de marketing, en discursos vacíos de realidad, en globos de colores.
Este no es un nuevo gobierno, este no es un nuevo plan económico, este es un nuevo “proceso”; con todo lo que el término “proceso” implica en nuestra historia. Se sacaron los uniformes, pero no pueden mostrarse sin careta.
Ahora, esconden sus armas y sus intenciones de saqueo detrás de palabras inofensivas, pero sabemos lo que encierra la mentira.
Sabemos qué quieren decir verdaderamente “sinceramiento”, “libre comercio”, “libre cambio”, “credibilidad”, “alegría”, ”EQUIPO”; en resumen: sabemos qué quiere decir “Cambiemos” y estamos aquí para servir de diccionario a quienes quieran enterarse.
Estamos aquí para arruinarles la fiesta de disfraces.