Los más de veinte sindicatos estatales que conforman el Frente Amplio Gremial (FAG), integrado por tres colectivos (Intersindical, Multisectorial y Frente de Gremios Estatales) son protagonistas del paro por 24 horas que se desarrolla este miércoles y de la movilización convocada en inmediaciones de la Legislatura para acompañar el discurso que dará el gobernador Gerardo Morales en la apertura del período de sesiones ordinarias.
El gobierno provincial dispuso un fuerte operativo de seguridad que incluye la afectación de unos 500 agentes policiales y el vallado de la zona circundante a la Legislatura.
También participan los sindicatos docentes -los maestros de Adep, los profesores de Cedems y los privados de Sadop-, y se suman las madres de los estudiantes de la Escuela Helen Keller, que resisten la incorporación de la Escuela Provincial de Teatro Tito Guerra al mismo edificio; alumnos y docentes de los Centros de Estudios Integrales para Jóvenes y Adultos (CEIJA) que se avabam de cerrar, y comunidades originarias de la puna que desde la mañana manifiestan en rechazo de los emprendimientos energéticos y mineros y en defensa del agua.
«Se moviliza contra las políticas expresadas en el aumento salarial del 5 por ciento, que es un insulto, porque ni siquiera hubo bono de fin de año que compensaba la pérdida de poder adquisitivo del año pasado», sintetizó en diálogo con El Submarino Radio (91.5) Fernando Acosta, secretario de Interior de la CTA Autónoma.
Pero no todo tiene que ver con los salarios. «A esos ajustes a los trabajadores se suman otras reducciones de gastos en educación, por ejemplo, que dejan y siguen manteniendo a una enorme cantidad de trabajadores en forma precaria, negándoles cargos a los docentes, cerrando escuelas», agregó Acosta, en referencia al cierre de los CEIJAS y de Institutos de Formacaión Docente, entre otros establecimientos.
«No quieren reformar ni mejorar. Solo quieren achicar y privatizar para hacer negocios -continuó-. Y los ajustes son solo para el pueblo, porque se triplicó la planta de funcionarios y se han aumentado enormemente sus sueldos».
Ante este panorama, es que la movilización de esta tarde apunta sobre todo a reclamar por las medidas que fueron anunciadas por el gobernador en la apretura de sesiones del año pasado y que no se cumplieron, además de expresar el mensaje de los trabajadores. «Ante las mentiras que va a decir, nosotros vamos a decirle, además de que es un mentiroso, que no vamos a permitir que siga apretando a los trabajadores, reprimiendo a los que protestan y castigando al pueblo para mantener sus negocios», agregó Acosta.
El sindicalista mencionó los tarifazos, la inflación, la falta de trabajo, la precarización laboral, los despidos, la judicialización de la protesta, y la persecución y represión a expresiones opositoras como las principales razones del descontento y del reclamo hacia el gobierno provincial.
Además de los estatales y docentes, participan de la movilización los taxistas y remiseros, sindicatos azucareros, organizaciones de la economía popular y organizaciones sociales.
Por su parte, el secretario general de Adep, Darío Abán, comentó en diálogo con El Submarino Radio que esta tarde marchan con «una bandera muy especial, muy sensible, que es la educación especial», en relación a la intención del gobierno de trasladar la escuela de teatro al edificio donde funciona el instituto Helen Keller, para niños hipoacusicos.
«Esperamos que cambien la política educativa, que razonen, porque no se pueden mezclar las modalidades, porque el edificio de la Helen Keller fue construido especialmente para atender a estos alumnos con discapacidad auditiva», indicó Abán, y agregó que profesionales del área les aseguraron que los niños hipoacúsicos necesitan un ambiente tranquilo, sin superposición de sonidos que pueden confundirlos y alterarlos.
Pero el problema de la Helen Keller y la Escuela Provincial de Teatro no es el único. Desde Adep reclaman además que haya inversión en infraestructura escolar. «Hay una gran gama de necesidades -describió Abán-; se está pagando alquiler por distintas dependencias, hay edificios viejos, no hay mantenimiento. Y las cooperadoras no reciben de la comunidad porque no hay plata».