Nóbrega, que pertenece al Partido de los Trabajadores (PT) fundado y liderado por Lula, sostiene en su dictamen que Petrobras -de la cual se desviaron cerca de 2.000 millones de dólares a través de contratos con otras compañías, con el objeto de financiar campañas políticas- «fue víctima de un cartel de malos proveedores con la complicidad de algunos funcionarios».
El legislador rechazó las afirmaciones de que hubo «corrupción institucionalizada» en la petrolera estatal y señaló que el caso se limitó a la actuación aislada de algunos de sus ejecutivos, entre los que mencionó al ex director Paulo Roberto Costa y al ex gerente Pedro Barusco.
«Es cuestionable la tesis de que hubo corrupción institucionalizada en Petrobras; esa hipótesis es injusta con millares de funcionarios de la empresa», manifestó Nóbrega.
De acuerdo con el diputado, en las declaraciones judiciales sobre el caso «no hay mención sobre encubrimiento de los ex presidentes de Petrobras, José Sérgio Gabrielli y Graça Foster, ni de ex consejeros de la empresa, como la presidenta Dilma Rousseff».
«Tampoco hay en los autos de esta Comisión Parlamentaria Investigadora ninguna evidencia en este sentido en relación con el ex presidente Lula o la presidenta Dilma», subrayó Nóbrega.
El caso de corrupción en Petrobras causó el procesamiento, y en varios casos la condena, de decenas de funcionarios, legisladores, empresarios y ejecutivos de empresas.
Asimismo, es uno de los motivos por los que sectores opositores pidieron el juicio político a Rousseff. Aunque varias de estas iniciativas ya fueron rechazadas, otras están pendientes de resolución en el Congreso.