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Un operativo a cargo de la intendenta de Quilmes, Mayra Mendoza, y Jorge Ferraresi, de Avellaneda, decidió el aislamiento de Villa Azul, en el límite entre ambos partidos, tras detectarse un brote de casos positivos de covid-19.
La decisión se tomó después de que, en varias jornadas del programa Detectar (Dispositivo Estratégico de Testeo para Coronavirus en Terreno de Argentina), se encontraron 53 casos de coronavirus en la zona.
El viceministro de Salud de la Provincia, Nicolás Kreplak, explicó en C5N que la «idea es que todo el barrio se quede en casa». Además, reveló que se «tomaron medidas especiales tal cual pasa con los geriátricos». En este sentido, los dos jefes comunales sostuvieron que «el objetivo es limitar la circulación de las personas».
Los intendentes, junto con el ministro de Desarrollo de la Comunidad provincial, Andrés «Cuervo» Larroque; el viceministro Kreplak; la diputada nacional Magdalena Sierra, y el senador provincial Emmanuel González Santalla recorrieron la totalidad del barrio de emergencia. En total relevaron 813 viviendas y 3128 personas, donde hubo 125 hisopados de los cuales, 53 fueron positivos, quedando 50 en estudio.
En un comunicado de la Provincia, sostuvieron que el comité resolvió aislar completamente al barrio con control total de entradas y salidas; instalar dos centros logísticos de atención sanitaria y de distribución de alimentos, ampliar los operativos de búsqueda de sintomáticos en la zona y, por último, detectar y aislar a la población de riesgo.
El Destape
