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La Sociedad Argentina de Pediatría (SAP) ha encendido una señal de alerta que preocupa a todo el sistema de salud: las coberturas de vacunación descendieron a niveles históricamente bajos y el país atraviesa, según la entidad, “una de las crisis más severas en décadas”. El crudo análisis se basa en datos oficiales del Ministerio de Salud y del Observatorio de la Infancia y Adolescencia.
El escenario es crítico. La SAP advirtió que el retroceso en la inmunización abrió la puerta al resurgimiento de enfermedades graves y que eran consideradas controladas, entre ellas la coqueluche (tos convulsa), que provocó al menos siete muertes en los últimos meses. Las coberturas actuales, indican los especialistas, ya no garantizan la inmunidad colectiva y exponen a toda la población, especialmente a los grupos más vulnerables como los lactantes.
Bebés en riesgo y «fragilidad inmunológica colectiva»
Los bebés menores de 18 meses son los más afectados: concentran el mayor número de hospitalizaciones y fallecimientos evitables. Así lo explicó el sanitarista y emergentólogo Eduardo Arellano, director de Reanimación Cardiopulmonar (RCP Argentina), quien describió el panorama como “una situación de fragilidad inmunológica colectiva” que compromete tanto la protección individual como la salud pública.
En este contexto, Argentina pasó de ser reconocida por tener uno de los calendarios de vacunación más completos y gratuitos del mundo —con 19 vacunas obligatorias— a enfrentar brotes activos y el riesgo inminente de reintroducción de enfermedades como el sarampión o la poliomielitis.
Recortes y desmantelamiento de programas territoriales
Arellano vinculó el deterioro de las coberturas al desmantelamiento del área de inmunizaciones del Ministerio de Salud durante los últimos dos años. Entre los factores más relevantes mencionó:
- La eliminación de programas territoriales de vacunación.
- El despido de 2.600 trabajadores esenciales, incluidos equipos de vacunadores, profesionales de salud sexual y referentes de control prenatal.
- La falta de nuevas adquisiciones de vacunas.
El especialista señaló que las dosis aplicadas en los últimos meses provienen de partidas compradas durante la gestión anterior, lo que agrava la incertidumbre de cara a 2026 y a la planificación de campañas futuras en provincias como Jujuy. A esto se suma la interrupción de operativos móviles y campañas comunitarias, herramientas clave para alcanzar a las infancias y a las familias de mayor vulnerabilidad en zonas rurales o de difícil acceso.
Un retroceso frente a décadas de avances
Para la SAP, el riesgo es claro: si no se revierte la tendencia, el país podría ingresar en un ciclo sostenido de reemergencia epidemiológica, perdiendo los avances de décadas en salud pública.
La advertencia llega en un momento clave del año, cuando los equipos sanitarios nacionales y provinciales suelen planificar estrategias para recuperar coberturas. Sin embargo, las organizaciones médicas alertan que, sin refuerzo presupuestario y sin reposición de personal especializado, será difícil reconstruir la trama preventiva que protegió históricamente a la niñez argentina y garantizar el acceso pleno al Calendario Nacional de Vacunación.
