Por la mañana, el Tribunal Regional de Brasilia anuló una de las dos sentencias que congelaban la asunción del expresidente, al hacer lugar a la apelación presentada por el Gobierno brasileño, que argumentó «falta de imparcialidad» por parte del juez Itagiba Catta Preta Neto, del Tribunal Federal de Brasilia, un abierto partidario del excandidato presidencial por la oposición Aécio Neves.
Y por la tarde, un tribunal de Río de Janeiro anuló la segunda cautelare vigente, con lo cual Lula volvió a ejercer plenamente su cargo de ministro, según confirmaron a EFE portavoces de la Abogacía General de la Unión (AGU).
Paralelamente, la oposición y ciudadanos particulares presentaron numerosas demandas en tribunales de todo el país para tratar de impedir el nombramiento de Lula, pero el gobierno anunció que va a recurrir todas ellas. Las causas cuestionan la legalidad del nombramiento debido a los procesos abiertos contra Lula por supuesta corrupción y por el peligro de que use su cargo para obstruir la Justicia, reseñó la agencia EFE.
Lula es investigado por supuestos delitos como lavado de dinero y falsificación y dos de los procesos abiertos contra él estaban en manos del juez Sergio Moro, titular del décimo tercer juzgado federal de la ciudad de Curitiba, pero fueron transferidos al Supremo debido a que el cargo de ministro le concede un fuero distinto.