Aramayo señaló que los mismos dirigentes de la ITE se sorprendieron ante la respuesta de los trabajadores a la convocatoria del paro de 96 horas, pero tiene una explicación: “Esto refleja la verdadera situación de los estatales, una situación de angustia y desesperanza, porque las familias no pueden llegar a fin de mes”.
“El gobierno debe afrontar esta realidad, dejar de hacer pavadas, dejar de demonizar a los trabajadores y abocarse a dar respuestas a los planteos”, afirmó.
El lunes a la mañana, los referentes de la ITE van a reunirse para evaluar el resultado de la medida de fuerza, mientras esperan que el gobierno los convoque para dar respuesta a los reclamos. “El miércoles pasado enviamos una nota en la que pedimos, primero, que nos hagan llegar los instrumentos administrativos legales que muestran que se pasaron a planta permanente a miles de trabajadores, según dicen ellos. Queremos el decreto donde diga que el compañero ya es de planta permanente. También queremos el recibo por el cual nos blanquearon el salario desde noviembre. Y también que nos convoque y nos reciba para debatir y encontrar un punto de acuerdo”, explicó Aramayo.
“De otra manera, este panorama se va agravar -advirtió-, porque los trabajadores no van a dejar de reclamar lo que es justo. Estamos convencidos de que existe la posibilidad de dar soluciones de parte del gobierno; si no es así, es porque falta voluntad”.
Aramayo detalló: “Ellos dicen que el 100 por ciento de la coparticipación es para pagar sueldos. En los ocho primeros meses de este años, la coparticipación aumentó un 42 por ciento respecto al mismo periodo del 2013. Pero nosotros recibimos, hasta junio de este año, solo un 28 por ciento. ¿Dónde está el otro 14 por ciento? Porque a nosotros no nos lo dieron. Les estamos diciendo que queremos como mínimo un 12 por ciento para llegar al piso de 40 por ciento de recomposición en el año 2014”.
El sindicalista se refirió también a las declaraciones de diversos funcionarios que se ocuparon de poner el acento en las consecuencias del paro sobre la prestación de servicios: “Es el conflicto que paraliza los servicios que utilizan los ciudadanos, entre ellos los propios trabajadores estatales, de manera que nos interesa destrabarlo conflicto porque, además de nuestro problema salarial, somos usuarios”, señaló.
“Los dichos de los funcionarios, como otras medidas del gobierno, dan vergüenza ajena”, lanzó, y enumeró: “Mandar decenas de abogados a las escuelas, policías a los lugares, inducir a los padres a que limpien las escuelas, todo lo hacen para no dar respuestas. Pero estas medidas no les sirvieron, porque los trabajadores han parado. Tampoco les va a servir en el futuro”.
Aramayo respondió también a las acusaciones lanzadas desde otros sectores sindicales, acerca de una supuesta inacción de la Intersindical en los últimos años. “Nosotros no tenemos problemas con ningún otro sector trabajador; nuestro problema es la patronal, común a todos los estatales, a ellos tenemos que enfocar nuestros esfuerzos e ideas. Quienes se enfrentan, son funcionales al gobierno. Nosotros estamos hace treinta años en la lucha sindical, en cambio otros no pueden explicar dónde estuvieron diez años, debajo de qué cama se metieron, y ahora aparecen queriendo recuperar lo que perdieron por su deserción. Yo le digo a quien expresó esto, que según parece es Carlos Santillán, que siga con la cubeta de hielo que esa es la suya, que no trate de confundir a los trabajadores”.