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La Iglesia Católica de Bolivia, sacudida por un creciente escándalo de abusos de menores, presentó hoy cuatro comisiones para recibir e investigar denuncias de personas que sufrieron abusos sexuales por parte de religiosos.
Las cuatro comisiones creadas por la Conferencia Episcopal Boliviana (CEB) están destinadas a la prevención, escucha, investigación y comunicación de las denuncias de abusos a menores de edad y personas vulnerables en el seno de la Iglesia, con el objetivo de acompañar a las víctimas y asegurar que los casos lleguen a la justicia, en medio del mayor escándalo de pederastia que golpea a la institución en el país sudamericano, informó la agencia AFP.
«Una de las tareas que tenemos dentro de estas comisiones tiene que ver con llevar al Ministerio Público cualquier denuncia que hubiera sido de conocimiento de la Iglesia para que se puedan hacer las investigaciones correspondientes», dijo la coordinadora de la Comisión Nacional de Investigación, Susana Inch.
Por su parte, Nancy Loredo, de la Comisión de Escucha, afirmó que su tarea será «brindar todas las condiciones, tanto físicas y emocionales, en las cuales las víctimas puedan ser acogidas y recibidas».
Bolivia fue sacudida por las revelaciones hechas el 30 de abril por el diario El País sobre los abusos cometidos por el fallecido clérigo jesuita Alfonso Pedrajas, desde la década de 1970.
El diario español publicó el diario personal del clérigo jesuita, que le fue entregado por un familiar de Pedrajas, más conocido como el padre Pica, muerto en 2009 en Bolivia de cáncer a los 66 años.
Según el diario personal del clérigo jesuita escrito en una computadora portátil, Pedrajas abusó presuntamente de decenas menores en internados católicos en Bolivia en las décadas de 1970 y 1980. Allí, el cura dice haber hecho «daño a mucha gente, a demasiados». Además, reconoció que fue protegido por clérigos superiores de la Compañía de Jesús.
El jesuita se instaló en Bolivia en 1971 y realizó labores educativas en varios centros hasta meses antes de morir. La mayor cantidad de abusos los habría cometido en el Colegio Juan XXIII de la ciudad de Cochabamba, centro del país.
El caso de Pedrajas provocó en Bolivia que se denuncie a otros sacerdotes que presuntamente también abusaron de menores.
La Fiscalía de Bolivia abrió una investigación, que se mantiene confidencial, y ha llamado a las víctimas a presentar denuncias.
Hasta ahora ocho denuncias por pederastia en contra los sacerdotes españoles Luis María Roma, Alejandro Mestre y Antonio «Tuco» Gausset, todos fallecidos.
La semana pasada se allanaron las instalaciones de la Compañía de Jesús en La Paz y se dispuso la reserva de las investigaciones de los presuntos abusos sexuales a menores que se han extendido a varios departamentos del país.
El presidente Luis Arce solicitó al papa Francisco todos los archivos y expedientes sobre los abusos sexuales cometidos por sacerdotes en Bolivia
Tras estallar el escándalo por abuso de menores que salpica una vez más a miembros de la Iglesia Católica, el Vaticano envió a Bolivia al Monseñor Jordi Bertomeu, miembro del Dicasterio para la Doctrina de la Fe, para conocer en persona todo lo ocurrido.
El Gobierno boliviano planteó la aplicación de un «mecanismo de reparación» para las víctimas de esos hechos y el Parlamento analiza la creación de una «comisión de la verdad», que investigue otros posibles casos de pederastia y abuso sexual a menores.
