Velázquez detalló que dos obras que empleaban a más de 300 operarios están paradas por falta de pago a las empresas encargadas de llevar adelante la ejecución de los trabajos. Se trata de la ampliación de la ruta provincial 1 y la construcción del nuevo puente sobre el río Grande.
El gremialista informó que el gremio ya le había advertido al gobernador Gerardo Morales sobre esta posibilidad, habida cuenta del retraso en la liquidación de varios certificados de obras y el malestar de los empresarios del sector.
“En Jujuy hay más de 3000 trabajadores de la construcción desocupados y por lo mismo anhelamos que las autoridades provinciales comiencen a dar cumplimiento a los anuncios y promesas efectuadas en diversas ocasiones, en campaña y durante el primer año de gestión”, señaló Velázquez.
En tanto, la ejecución del puente que unirá a Bajo La Viña con el barrio San Francisco de Alava venía interrumpiéndose debido a la falta de pago a la UTE que ganó la licitación de la obra, integrada por Jumi y Demisa. “Se suspendió a todos los trabajadores, alrededor de un centenar, antes de Navidad y surgió un compromiso de las empresas de retomar el ritmo de obra y reincorporar al personal el 9 de este mes, siempre que Vialidad Nacional destrabe los pagos”, reveló.
“En oportunidad de una audiencia concedida por Morales, le advertimos sobre esta situación y le anticipamos que la obra iba camino a paralizarse, con la consecuencia lógica y negativa para los trabajadores. No sabemos si hubo una gestión del mandatario ante el gobierno nacional y si la hubo, no resultaron, porque la realidad está a la vista de todos”.
Refirió que el 9 del actual se vence el plazo de la suspensión de los más de 100 trabajadores afectados a la UTE. Velázquez dijo que ése será un día clave, ya que se verá si la obra se paraliza de manera definitiva, o si se vuelve a trabajar y se levanta la suspensión de los obreros.
También aludió a la paralización de la ruta provincial 1, que une San Salvador de Jujuy con Palpalá. “Esta obra está totalmente paralizada, hace aproximadamente dos meses y no vemos una solución a corto plazo. En el lugar sólo quedan los serenos de las empresas que permanecen allí cuidando las herramientas de trabajo y los carteles de seguridad”.
Velázquez afirmó que la recesión en la construcción se ve doblemente perjudicada por la paralización del puente del río Grande y de la ruta 1, dos obras emblemáticas en materia vial. Al mismo tiempo, el dirigente dijo que también es preocupante que se hayan suspendido trabajadores de varias empresas que realizaban obras en el norte provincial. Puso como ejemplo la situación de Vial-Tec que construye la ruta 9 de Tilcara a La Quiaca.
Por último, dijo que la situación es grave y estimó que este 2017 será un año difícil. “Ojalá que este gobierno entienda de una buena vez la necesidad de los trabajadores y la importancia que tiene la obra pública para motorizar la economía de la provincia.