El FGE pidió un bono extraordinario de 5000 pesos a fin de compensar la pérdida de poder adquisitivo de sus salarios por la inflación. Esperan conocer la modalidad en que la provincia propondrá la ayuda de fin de año, que los gremios pretenden se haga efectiva íntegramente.
“Hay versiones circulando con distintos montos y modos”, señaló la dirigente, sin dar precisiones, y agregó: “El gobierno recibe las remesas de la coparticipación, y tenemos entendido que recibió una ayuda extra de la que no sabemos el monto”.
Canchi se hizo eco también de las “versiones que dicen que gracias a esta ayuda extra, se estaría dando una gratificación a los diputados de entre 12 y 15 mil pesos, y de algún lugar sale ese dinero”.
“Los fondos salen del mismo lugar, de la bolsa nacional o de la provincial, y si hay ahorro en el presupuesto, hay que dárselo al que está más postergado, si no, seguimos aumentando la brecha de la desigualdad”, afirmó la dirigente, y diferenció: “En cambio acá la gente que más cobra siempre percibe más, y la que menos tiene se queda mirando y conformándose con una dádiva. Esta brecha escandalosa hizo que el gobierno esté tan cuestionado, y por eso perdió en las elecciones. Si distribuyeran bien, tendrían en el voto como Evo Morales en Bolivia”.
“La ayuda extraordinaria es solo un parche ‒aclaró la sindicalista‒; luego los bolsillos vuelven a quedar afectados por la inflación. Parece que nos estuvieran dando una limosna”.
La dirigente recordó que “la ayuda extraordinaria de fin de año no es el único tema pendiente; está también la desprecarización, las viviendas y jubilación”. Sobre este último, adelantó que está “casi listo” el proyecto de ley que presentarán en la Legislatura, que plantea un mecanismo por el cual los trabajadores se puedan jubilar con el 82 por ciento de su salario.
La dirigencia del FGE mantuvo una reunión en la que se discutió la modalidad en que continuarán con las demandas. “Se consensuaron medidas de fuerza cortas y contundentes, si es que se hacen”, precisó, y relató “uno de los sindicatos propuso una paralización total de la provincia con cortes de rutas y puentes”, sin indicar de cuál se trata.
Canchi dijo que la propuesta de paro total fue, en principio, rechazada: “Sabemos que esto causa malestar, y no habría necesidad si el gobierno nos recibiera y nos diera una respuesta, porque de nada vale que nos reciban si no tienen nada para decirnos”.
“Está todo en sus manos”, agregó la sindicalista en referencia al Ejecutivo provincial.
Recordó además que cada sector tiene sus reclamos particulares, y puso como ejemplo el caso de Atsa, que está pidiendo una reunión con el ministro de Salud, Saúl Flores, para plantear sus demandas. Del resultado de ese encuentro, adelantó, dependerá si los trabajadores de la sanidad llevan adelante medidas de fuerza particulares.
Consultada sobre la represión policial de la semana pasada contra la Intersindical de Trabajadores Estatales (ITE), por la que el FGE expresó su solidaridad, Canchi señaló: “Creo que los sindicatos tenemos que ser dialoguistas, pero obviamente, cuando no se da, hay que buscar otra manera”, y agreegó: “Se dijo que los enfrentamientos con el gobierno eran de carácter político, pero si esto es así, es obvio que los sindicatos se van a posicionar de un lado o de otro”.
Precisamente respecto de la alineación política del FGE, comentó: “Ayer tuvimos una reunión en la que hubo representantes sindicales, estatales y privados. Nosotros no estamos casados con ningún sector político, a pesar de tener una militancia política. Queremos escucharlos a todos y después participar”.
En esa línea, destacó que no hay ningún dirigente sindical como diputado nacional, ni como diputado provincial ni como concejal. “Entonces vamos escuchar las plataformas, y con el más potable vamos a discutir la necesidad de representación sindical en un 33 por ciento”.
Admitió que hubo conversaciones para formar un frente o partido político surgido del sindicalismo, pero afirmó: “Yo no lo veo posible, no es fácil competir; se necesita una estructura y dinero”.