Tuve la oportunidad de conocer el maravilloso trabajo que realiza la organización Tupac Amarú y visitar a Milagro en su injusta detención. Y pude comprender que con su fortaleza y con la que nosotros le trasmitamos vamos a lograr que se termine con esta acción ilícita.
Las Abuelas de esto sabemos, tenemos experiencia. Muchos años pasaron para que pudiéramos conseguir justicia para nuestros hijos y nuestros nietos. Fueron muchos los obstáculos y las malas intenciones, pero siempre perseverantes hemos logrado junto a nuestro pueblo llegar a la Verdad, la Justicia y la Memoria que tantos años anhelamos y que hoy tenemos que defender.
Estoy segura de que en un futuro nos encontraremos todos, junto a Milagro en libertad, para fundirnos en un abrazo y seguir construyendo para nuestro pueblo.