Movimientos sociales organizaron por octavo año consecutivo la cena de Navidad en Congreso. «Se nota la crisis», dijo lamentándose Juan Grabois, referente del Movimiento de Trabajadores Excluidos.
El dirigente reveló que más mil personas en situación de calle que nunca habían venido compartieron la cena navideña, actividades sociales, juegos y premios, frente al Congreso,
Una marea humana transformó en pocas horas la Plaza Congreso en el patio de una familia enorme y todos y todas querían olvidar por un rato, el eco de las leyes que en el primer año de Javier Milei como presidente golpearon duramente a las clases trabajadoras y populares.
Para olvidarse de la situación, se vivió una fiesta callejera, que, tras pasar por la peluquería, por podología y manicura, una sala de atención de primeros auxilios, fueron a comer y convirtieron a la avenida Entre Ríos en una enorme pista de baile con los grupos en vivo que hicieron su aporte.
La Navidad Solidaria en Congreso se celebra desde hace ocho años, a pesar del calor, el frío o la lluvia, y fue organizada por el MTE, Nuestra América, Proyecto 7 y la Unión de Trabajadores y Trabajadoras de la Economía Popular (Utep).
«No le vamos a resolver la vida a nadie, pero esperamos que sea una noche distinta», dijo Sergio Sánchez, dirigente del MTE, durante una de las capacitaciones para voluntarios que se hizo en el patio del comedor que la organización tiene en Constitución, en la previa a la gran noche.
Grabois explicó que, aunque la cantidad de voluntarios fue destacable, la necesidad desbordó la capacidad: «La convocatoria de voluntarios es una alegría, lo que es triste es lo grande que es la convocatoria de gente que necesita un plato de comida».
Durante la jornada, se vivieron momentos emotivos y de solidaridad, pero también dificultades logísticas. Debido a la cantidad de asistentes, los organizadores tuvieron que extender la comida con lo que tenían y, finalmente, se quedaron sin provisiones para poner sobre las cincuentas mesas que colocaron.
«Esto muestra la gravedad de la situación que atraviesan miles de familias en el país», señaló un voluntario que participó de la organización».
Según el Observatorio de Desarrollo Humano –dependiente del Ministerio de Desarrollo Humano y Hábitat porteño– la cantidad de personas en situación de calle en la Ciudad de Buenos Aires creció un 35% en el último año, con 4.416 personas viviendo a la intemperie en noviembre 2024.
Sin embargo, las organizaciones sociales apuntan que la cifra podría ser sensiblemente mayor, con más de 12.000 personas en situación de calle.