El primer concurso que organizó la sociedad del Estado, Cannava, denominado «Invernadero de Ideas», informó que hay tres ganadores y se presentaron alrededor de 140 proyectos de distintos puntos del país, para el aprovechamiento industrial del cáñamo.
Los proyectos premiados son:
- “Hempower-Cañamo”: Producción de fibra de cáñamo, una solución sostenible para la moda, presentada por Gastón Arostegui y Alejandro Malgor, de Jujuy y Mendoza.
- “Pla Cañamero”: Producción de filamento para impresión 3D a partir de polímeros de origen vegetal, presentado por Carlos Castaño, Francisco Castaño y Margarita Castaño, de General Pico, La Pampa.
- “Econcreto”: Producción de material estructural para bioconstrucción y relleno de estructuras, presentado por Susana Osorio Segovia, de Jujuy.
El jurado evaluó en cada proyecto finalista su originalidad, el nivel de resolución, la viabilidad productiva, el nivel de innovación, la capacidad de generación de empleo, su adecuación a criterios de sostenibilidad ambiental, la propuesta de emplazamiento del proceso productivo de Cannava y la potencialidad de comercialización en el mercado local e internacional.
El proyecto ganador se destacó por su propuesta sinérgica con otras áreas de la economía de Jujuy, como el turismo de la quebrada y los productores de la puna.
La fibra de cannabis para uso textil es duradera y resistente lo que la hace ideal para la fabricación de indumentaria de alta calidad.
Además, aparece como una alternativa sostenible a las fibras tradicionales, como el algodón, que requiere grandes cantidades de agua y pesticidas para su producción.
El segundo premio, se destacó por ser la propuesta más innovadora y de alta tecnología, proponiendo el uso de la fibra de cannabis como una alternativa renovable para la producción de filamento para la impresión 3D, en sustitución del plástico.
La valoración que hizo el jurado acerca de la escala del proyecto concluyó que se encuentra todavía en una fase de investigación y desarrollo, por lo que la posibilidad de incubación del proyecto aumenta sus chances.
Finalmente, el tercer premio, fue valorado porque a diferencia de los otros, se focalizaba en el uso de la cañamiza (en cuenta de la fibra), con el objetivo de fabricar mobiliario de baja densidad, con la particularidad de que fue el proyecto basado en uso de esa parte de la planta que lograría los productos de mayor valor agregado con ese material.
Hubo menciones de honor: En primer lugar, para “Jujuy Construye”, biocompuesto alternativo y ecológico a los materiales tradicionales de construcción, presentado por María Florencia Puca, de Jujuy. En segundo lugar, “SATICA SAS”, empresa productora de ladrillos ecológicos, presentado por Gaspar Yachetta, Sergio Villagra y Marcos Uriza, de Villa María, Córdoba.
«Incuba fue un primer sondeo del interés y el talento que existe en el sector privado en el contexto del aprovechamiento industrial de partes de la planta de cannabis que no se utilizan para la elaboración de productos finales de grado farmacéutico, lo que pudo concretarse en base esta lógica de vinculación y articulación entre el sector público y el sector privado de todo el país, promovido por el Gobierno de Jujuy. Esta iniciativa permitirá ahora que los proyectos ganadores, en la medida de sus posibilidades y con el acompañamiento público, puedan incubar sus desarrollos dentro del complejo de biotecnología de Cannava», destacó el titular de la sociedad del Estrado, Gastón Morales.
Finalmente, el titular del organismo agradeció a todos los concursantes y destacó la labor realizada por el jurado compuesto por David Mitlin, profesor e investigador académico científico de la Universidad de Texas; la arquitecta Elena Leguía; Miriam Serrano, docente e investigadora universitaria, Secretaria de Ciencia, Tecnología e Innovación de la provincia de Jujuy; y al arquitecto Ramiro Tejeda, Secretario de Planificación del ministerio de Infraestructura de la provincia de Jujuy.