Condenan a perpetua a una madre que ahorcó a su hijo de ocho años

La justicia penal de Jujuy condenó a Saturnina Ajnota Artega a prisión perpetua por el delito de «homicidio doblemente calificado por el vínculo y por ensañamiento», contra su hijo Juan José Mamaní Ajnota, de ocho años. El trágico hecho ocurrió el 21 de enero de 2014 en una plazoleta de La Quiaca.

La fiscal del Tribunal Oral en lo Criminal N° 3 Delia Ortíz solicitó la pena de reclusión perpetua para la mujer boliviana, de 30 años. En su alegato afirmó que “la intención de la mujer era terminar con la vida de su hijo, cómo, dónde y de qué manera”, para fundamentar su pedido de ensañamiento y alevosía.

El juicio oral se desarrolló en apenas dos audiencias. En la primera, prestaron testimonio siete personas, entre ellas médicos y peritos del Poder Judicial, que fueron contundentes con sus informes contra la mujer. Aseguraron que sabía lo que hacía, que tiene sus facultades mentales intactas, y algunos señalaron: «Lo que nunca sabremos es qué pasó por su cabeza para cometer semejante atrocidad”.

Según la requisitoria fiscal, el martes 20 de enero de 2014, la mujer llegó a La Quiaca con su hijo, en horas de la tarde. Tiempo después, en la plazoleta 23 de Agosto, ubicada entre Avda. Bolivia esquina Árabe Siria y Avda. Sarmiento, un sitio público que no tiene iluminación, se ubicaron en la parte central, al borde de una pared de piedras.

Ya en la madrugada, en medio de la oscuridad, en completa soledad, la mujer procedió a darle muerte al menor. Según la autopsia, fue por «asfixia por compresión externa circular del cuello y sofocación».

Posteriormente, a los fines de ocultar el cadáver de su hijo, la acusada colocó el cuerpo en una bolsa de arpillera que cerró con un nudo, lo dejó ahí y viajó hacia la provincia de Buenos Aires. Allí la encontraron tras la orden de detención que libró el fiscal de Investigación a cargo del caso, Aldo Lozano. Vivía con su esposo y dos hijos, hermanos del niño muerto.