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Confirman la relación entre el servicio penitenciario y el ejército

En la audiencia de hoy, prestaron testimonios cuatro personas, tres ex guardiacárceles y un ex juez federal de Jujuy y uno de ellos, confirmó que Ricardo Ortiz era el nexo entre el servicio penitenciario provincial y el área 323, que era del ejército argentino.

El segundo juicio por los crímenes de lesa humanidad que se lleva a cabo en Jujuy, retomará las audiencias el próximo miércoles 19 de marzo. 

 Alberto Guzmán afirmó que Ortiz “fue el nexo”  con los militares, que integraban el Área 323, donde entregaban a los presos políticos, cuyos jefes era el coronel Néstor Bulacio (fallecido) y el prófugo Juan Carlos Jones Tamayo.

 Aseguró que no presenció la entrega de víctimas, tarea que estaba a cargo de la seguridad interna del penal, cuando él se desempeñaba como secretario del director del Penal,  y explicó que “hasta se sancionaba a los que hablaban o saludarán los presos políticos”.

 En este segundo juico, se está develando el secuestro y asesinato de Dominga Álvarez de Surta y las desapariciones de Osvaldo José Garibaldi, María Alicia del Valle Ranzón, los hermanos Juana Francisca Torres Cabrera, Pedro Eduardo Torres Cabrera, Jaime Lara Torres y Jorge Turk Llapur, que entraron al penal de barrio Gorriti desde los últimos días de mayo de 1976 y fueron sacadas y desaparecidas el 10 de junio del mismo año

 Por este proceso judicial, están sentado en el banquillo de los acusados, los ex penitenciarios, Carlos Alberto Ortiz, su hermano Orlando Ricardo Ortiz, Herminio Zárate y Mario Marcelo Gutiérrez, al igual que el ex oficial del Ejército Antonio Orlando Vargas, condenado a 25 años de prisión en el primer juicio de lesa humanidad y el ex suboficial del Ejército César Darío Díaz, por los delitos de homicidio, secuestros y torturas.

 También declaró el ex juez federal subrogante durante la dictadura militar Hugo Mezzena, quien denunció que las autoridades de la dictadura militar no cumplían con las órdenes de liberación que dictaba el juzgado federal.

 Sostuvo que «libre ordenes de libertad de detenidos, pero varias de ellas, no se cumplían y ante el incumplimiento, nos íbamos a la Corte Suprema».

 Otros de los testigos de hoy fueron Patricia Singh, ex esposa del represor y procesado Gutiérrez, hermana de Néstor Eusebio Singh, un alto mando de la prisión provincial, muy vinculado con las detenciones y desapariciones del mayor centro clandestino de detención que hubo en Jujuy.

 Cerrando la jornada de audiencia el testimonio de José Ibáñez, guardia cárcel, quien dijo conocer a los imputados, pero no saber hayan torturado en el interior del penal. 


 

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