La flamante presidente del Partido Justicialista, Cristina Fernández de Kirchner quiere evitar que haya internas partidarias en Jujuy, cuando parece que, en la provincia entre los meses de abril y mayo, habrá elecciones legislativas, y la ex mandataria quiere evitar un desgaste en el partido.
La solución kirchenrista sería un esquema de rotación en la presidencia del partido que busca consolidar la unidad entre los sectores enfrentados, que lidera por un lado, la senadora nacional, María Carolina Moisés y del otro lado, la diputada nacional y camporista, Leila Susana Chaher.
La solución llega luego de meses de incertidumbre marcados por fallos judiciales que pospusieron el proceso eleccionario interno y mantuvieron en vigor la intervención extendida.
La decisión sería 2025-27, conduce Moisés, y 2027-29, la titular es Chaher. Cada una de las legisladoras tendría un mandato de dos años.
Desde su residencia en El Calafate, donde pasará las fiestas junto a su familia, Cristina Kirchner dio el visto bueno a este esquema de rotación. La decisión ya fue transmitida a los interventores actuales, Gustavo Menéndez, intendente de Merlo, y el ex ministro de Seguridad, Aníbal Fernández, quienes siguen al frente del PJ jujeño como interventores. Solo resta la firma de conformidad de los sectores liderados por Moisés y Chaher para oficializar el acuerdo.
El consenso implica no solo la alternancia en la presidencia, sino también una distribución equitativa de cargos en secretarías, consejerías y congresales entre todos los sectores del PJ provincial, incluidos los que quedaron fuera de la disputa directa, como el liderado por Diego Martín Palmieri.
El acuerdo en Jujuy busca no solo garantizar la unidad partidaria, sino también posicionar al PJ como una fuerza competitiva en un escenario dominado por el oficialismo provincial liderado por el gobernador Carlos Sadir, y partidariamente por el ex mandatario Gerardo Morales.
Cabe recordar que la intervención al peronismo vernáculo ya lleva un año y medio, enfrentando divisiones internas que llevaron a la justicia electoral a habilitar solo dos listas en la última etapa del proceso: una encabezada por Carolina Moisés y otra por Leila Chaher. La tercera lista, liderada por Martín Palmieri y vinculada al gobernador riojano Ricardo Quintela, quedó fuera de la contienda.
El objetivo que comiencen el año electoral con una dirigencia renovada, y este modelo de rotación y consenso podría convertirse en un esquema replicable para resolver conflictos internos en otras provincias.