El presidente de Brasil, Luiz Inácio Lula da Silva, llamó en su discurso de apertura de la cumbre de la Unión Europea (UE) y la Comunidad de Estados Latinoamericanos y Caribeños (Celac) a llegar a acuerdos que «preserven las capacidades de las partes de responder a los desafíos presentes y futuros».
«Esta reunión confirma que nuestros empresarios están plenamente comprometidos con el relanzamiento de esta alianza histórica, basada en la certeza de que el éxito de cada uno es fundamental para nuestro éxito común», dijo este lunes al comienzo de su disertación en Bruselas.
Lula destacó la importancia de la inversión en América Latina por el papel «estratégico» que tiene para Europa y el mundo, al sostener que la región posee «enormes oportunidades de inversión y de expansión del consumo» y que estos países «requieren inversiones en infraestructuras logísticas diversificadas, sociales y urbanas».
«Queremos un acuerdo que preserve la capacidad de las partes para responder a los retos presentes y futuros», sostuvo Lula.
En ese marco, señaló que «la Unión Europea es el segundo socio comercial de Brasil» y que un «un acuerdo equilibrado Mercosur-UE abrirá nuevos horizontes».
Asimismo, destacó la importancia de la contratación pública para articular las inversiones en infraestructuras y sostener la política industrial, y anunció el lanzamiento de un nuevo plan de inversiones en Brasil para promover la modernización de las infraestructuras, inversiones en rutas, ferrocarriles, vías navegables, puertos y aeropuertos.
Con respecto al cambio climático, Lula señaló que el 87% de la electricidad de Brasil procede de fuentes renovables, y sostuvo que es posible generar un crecimiento de forma sostenible y eficiente.
«Estamos sentando las bases para la reindustrialización del país con empresas menos contaminantes, más densas tecnológicamente y la generación de empleos verdes y de calidad. Brasil ha vuelto a la escena internacional para contribuir a abordar los retos a los que se enfrenta nuestro planeta, como la crisis del cambio climático y el aumento de las desigualdades», expresó.
El presidente había propuesto, en la última reunión de líderes sudamericanos que tuvo lugar en mayo pasado, en Brasilia, actualizar la cartera de proyectos del Consejo Sudamericano de Infraestructura y Planificación, reforzar la multimodalidad y priorizar proyectos de alto impacto para la integración física y digital, especialmente en las regiones fronterizas.
También hizo referencia a la próxima reunión de presidentes de los países amazónicos en agosto próximo, para articular iniciativas comunes para la protección y el desarrollo sostenible de ese bioma.
Resaltó que es necesario sostener una «agenda de paz, cooperación, aumento del comercio y la inversión, creación de empleo y crecimiento sostenible» entre Europa y América Latina y el Caribe.
Lula finalizó su discurso con un llamado a la redistribución de la renta como condición necesaria para que se pueda ampliar el consumo, generar más oportunidades en los servicios, la industria y la agricultura a escala mundial.