Cuando faltan 24 horas para que se dirima la interna radical y sea elegido el titular del Comité Nacional de la Unión Cívica Radical, los principales dirigentes de la alianza opositora no quieren verse las caras y suspendieron el encuentro de la mesa nacional de Juntos por el Cambio (JxC) que se haría este jueves.
Los principales dirigentes del PRO no quieren que el gobernador de Jujuy, Gerardo Morales, le exija explicaciones al jefe del gobierno porteño, Horacio Rodríguez Larreta, por la ruptura del bloque de diputados del radicalismo.
La postergación, sin fecha aún, permitirá que se realice la elección de autoridades del radicalismo, prevista para mañana viernes.
Cabe recordar que el mandatario de Jujuy dijo públicamente que iba pedirle explicaciones a Rodríguez Larreta, por ser el mentor del quiebre del bloque de la cámara baja.
Morales aseguró que Larreta “a cada dirigente radical le regala un cargo”, en clara alusión al senador nacional y archienemigo de Morales, Martín Losteau, y su grupo Evolución Radical. Por ahora, sigue sin definirse si Lousteau enfrentará a Morales, que es el candidato puesto para presidir el partido centenario.
Mientras tanto, el actual titular de la UCR, Alfredo Cornejo, sigue buscando que haya una lista de unidad y evitar así la carnicería que podría ser el encuentro del viernes, donde el sector de Lousteau y de Emiliano Yacobitti podría impugnar la elección.
Pero, también acusan a Morales de tampoco querer unidad y prácticamente los declaró enemigo público a sus posibles adversarios de ser «empleados de Larreta».
Para Cornejo también hay lo acusan de ser el organizador de la reunión que terminó muy mal, casi a las trompadas, entre Lousteau y Morales. «La voluntad para acordar por parte de Alfredo está, pero no por parte de Morales», resumen en el entorno del actual presidente del partido.
Morales a lo largo de su carrera política, se la pasó haciendo enemigos, dentro y fuera del radicalismo, cree que ya es presidente de la UCR porque afirma que maneja más de 60 delegados de los 96 que elegirán al futuro presidente de la UCR. Tiene cerrados acuerdos con los otros gobernadores y no siente que necesite negociar nada con Lousteau.
Hasta ahora, Lousteau no mostró sus cartas: se dice que su espacio competirá con algún candidato, pero el senador no confirmó si se enfrentará a Morales. Sí hubo señalamientos legales sobre los distritos que están intervenidos y quedó abierta la puerta a que toda la elección se judicialice.