Por Corriente Nacional Docente Conti-Santoro. El gobierno de Morales sigue avanzando sobre nuestros derechos. Esta vez, congelando puntajes, traslados y ascensos con el decreto-acuerdo N° 1807, que entraría pronto a ingresar a la Legislatura provincial para convertirla en ley. Decimos pronto porque no sabemos en qué momento se tratará el proyecto, lo cual no es casual. El gobierno sabe que tendrá que enfrentar una enorme oposición por parte de la docencia. Pero veamos de qué se trata este nuevo avasallamiento.
En el artículo 1° se propone “extender la validez de los Listados Únicos de Orden de Mérito Definitivos 2019/2020 hasta el inicio del término lectivo (ITL) 2022, en todos sus efectos, niveles y modalidades educativas, conforme a los motivos expuestos en el exordio.” Lisa y llanamente, los puntajes se congelan. Aquí queda totalmente al desnudo la política del gobierno. Para ellos, el trabajo virtual que realizamos no tuvo ningún valor, es por eso que nos congelan el puntaje y nos niegan sumar puntos por el año trabajado. También congelan la posibilidad de sumar puntos por cursos. Después, dicen que no queremos capacitarnos…
También se suspenden transitoriamente los «traslados» y «cambios de función». Este punto genera más bronca en los docentes ya que son cientos los que buscan los traslados. Un docente que recién se inicia, comienza su carrera en el interior profundo de la provincia u otras zonas. Recién con el paso de los años, pueden encontrar una escuela más cercana de su domicilio. Con este decreto, los compañeros tendrán que esperar, quién sabe hasta cuándo, el ansiado traslado.
Tampoco habrán “concursos de ascensos”, como figuran en el artículo 4 y 5, ya que “sólo podrán inscribirse para cargos correspondientes a la Región Educativa de su domicilio.” De la mano, se amplían “hasta el inicio del término lectivo (ITL) 2021, el periodo para solicitar «permutas», hacia instituciones de la Región Educativa en la que se domicilia el agente.” En ambos artículos vislumbra la política ajustadora del gobierno de Morales-Calsina, en donde impide que los docentes sin cargo puedan acceder a sus primeras horas, ya que al docente que recién se inicia se le dificulta poder acceder a un cargo cercano a su localidad y domicilio, debiendo trasladarse hacia otras regiones para poder sumar horas y puntaje. A su vez explícitamente imponen al docente trabajar de forma cercana a su domicilio, permitiéndole al gobierno se «ahorre» el gasto del abono docente, algo que ya vienen imponiendo en materia de ajuste.
El decreto-acuerdo N°1807 se enmarca dentro de una serie de avasallamientos por parte de Morales y Calsina: congelamiento salarial, presentismo, cierre y fusión de cursos, cierre de carreras terciarias, grilla de calificaciones, etc. En estas condiciones, el gobierno aceleró la vuelta a las aulas.
En la última asamblea de autoconvocados, junto a los gremios de ADEP y SADOP, se votó estar en alerta y movilización para cuando el gobierno ingrese el Decreto-acuerdo N° 1807 a la legislatura para convertirlo en ley. También se está exigiendo la derogación de este documento que soslaya los derechos adquiridos en años en las luchas docentes.
Para la Corriente Nacional Docente Conti Santoro Jujuy, no solo hay que derogar el Decreto-acuerdo 1807, sino toda la catarata de resoluciones que violan nuestras conquistas. A su vez como venimos exigiendo, el Gobierno debe garantizar las condiciones de bioseguridad en todas las escuelas, sumando al regreso de los otros años a las escuelas, la vida de los docentes y estudiantes valen, no somos materiales descartables. También debe hacerse cargo de la educación remota, hasta el día de la fecha los gobiernos de la Nación y la Provincia no han puesto ni un peso para garantizar los instrumentos tecnológicos, como ser computadoras e internet gratis para docentes y alumnos.
Hay que seguir exigiendo que los docentes desocupados puedan integrarse al sistema educativo dual que va a imponerse, que de por sí es una sobrecarga sobre los docentes con cargos, y ayudaría mucho que los compañeros sin trabajo se sumen, y que tengan un salario acorde a las dos canastas básicas de alimentos, y no el salario de hambre que tenemos.
Finalmente, queremos proponer la estabilidad laboral para los cientos de docentes que son suplentes y provisionales, que vienen garantizando las clases virtuales, y que al finalizar el año lectivo 2020 quedarán sin trabajo, en vez de congelar el puntaje, por ejemplo, tendrían que pensar en los docentes que cada año viven una odisea buscando un cargo, y si aseguramos que continúen en sus puestos de trabajo, no solo se garantiza la estabilidad laboral, sino una continuidad pedagógica con los alumnos que han tenido en este año totalmente excepcional.