El fiscal Gustavo Araya había imputado a los tres por «atentado a la autoridad calificado por haber echado manos en la autoridad» y «lesiones leves calificadas», a raíz de los incidentes ocurridos en la sede del municipio de San Salvador de Jujuy eñ 11 de mayo. El abogado defensor, Luis Orellana, había pedido el cese de detención, que finalmente aceptó el juez Zurueta.
Los sindicalistas salieron de la Brigada de Investigaciones, donde estuvieron alojados desde su detención, a media mañana.
En los últimos días se realizaron numerosas marchas en toda la provincia pidiendo por la liberación de los tres dirigentes, y el secretario general del gremio, Carlos Santillán, había advertido que endurecrían las medidas de fuerza si se mantenía la detención de Santillán, Mirkin y Sandoval.