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Después de un mes, fueron liberados dos obreros del ingenio El Tabacal

Por Miguel López. Los obreros del Ingenio El Tabacal fueron liberados este viernes, luego de un mes de estar detenidos por órdenes de un poder judicial adicto a la empresa Seaboard Corporation. Moreno y Méndez, que siguen luchando por su reincorporación, al quedar en libertad se abrazaron con sus compañeros, quienes gritaron fuerte “viva la lucha obrera”.

Sus compañeros de trabajo de la fábrica y el campo felices, sus parejas Gisela y Romina felices, sus hijos contentos, el pueblo obrero de Yrigoyen, Tabacal y Oran los abraza. Nosotros a cientos de kilómetros de ellos, estamos llenos alegría, esa alegría que mezcla sonrisas con lágrimas. Esta subjetividad inunda el departamento de Oran, donde trabajan y viven mis hermanos, los obreros del Ingenio El Tabacal.

Jorge Moreno y Martin Méndez están libres, mal que le pese a la empresa yanqui Seaboard Corporation y sus títeres del poder judicial (la fiscal Sofia Fuentes Mayorga y el juez Francisco Oyarzu) y político salteño (el gobernador Juan Manuel Urtubey y el intendente Marcelo Lara Gros), que tuvieron un mes y dos días presos a estos dos obreros azucareros por solo reclamar su reincorporación a sus puestos de trabajo y tareas en el ingenio y refinería San Martin del Tabacal.

Empresa, Justicia y Gobierno, se aliaron para intentar con estas detenciones derrotar a los trabajadores azucareros combativos del Ingenio El Tabacal, y mostrar a los despedidos, que son 181 en este ingenio, y a los detenidos, Moreno y Méndez, como lo que le esperaba a quienes se organicen y reclamen sus derechos. Pero esta alianza no pudo mantener la más brutal cara de su política de amedrentamiento: la prisión a los obreros que luchan. Porque las mujeres se organizaron y difundieron esta injusticia por todos lados con carteles, entrevistas en radios, diarios y canales de televisión, por las redes sociales, movilizándose con los trabajadores y la comunidad, y presentando con sus abogados (Hernán Mascietti y David Leiva) pedidos de libertad en el poder judicial.

La fiscal totalmente parcial, partidaria de la multinacional que administra El Tabacal, fue derrotada por la fuerza de otras mujeres, las mujeres parejas de los detenidos.

La fiscal Sofia Fuentes Mayorga quería la prisión preventiva de los detenidos, argumentando el peligro de fuga y entorpecimiento de la causa, argumentando sus decisiones en una doctrina jurídica reaccionaria que plantea que se es «culpable hasta que demuestre lo contrario».

Gisela y Romina Rodríguez, las compañeras de vida de Moreno y Méndez, junto a sus abogados, a los obreros del Tabacal y a sectores de la comunidad del pueblo obrero de Yrigoyen, insistieron en su exigencia de «libertad, libertad, a los presos por luchar», y así no rindiéndose nunca e intentando ganar la solidaridad de todo el pueblo lograron arrancar de las garras de la policía y el poder judicial salteño a sus maridos.

Un ejemplo de que la lucha gana, contra todo escepticismo y desmoralización irradiado desde los partidos patronales y las burocracias sindicales a las bases obreras. La libertad de los presos por luchar debe servir de impulso para fortalecer la pelea por la reincorporación de los 181 despedidos, entre los que se encuentran Moreno y Méndez, y por la absolución de los compañeros, en el marco de una causa plagada de irregularidades.

Termino estas líneas repitiendo lo que un obrero del tabacal grito al recibir y dar un abrazo a los compañeros Méndez y Moreno, en la puerta de la seccional N°20 de Orán: ¡Viva la lucha obrera!

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