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Ecuador: Advierten que las fuerzas de seguridad vulneran derechos fundamentales 

Foto: EFE

Ante la crisis de seguridad que atraviesa Ecuador y que llevó al presidente Daniel Noboa a determinar que el país tiene un conflicto armado interno, la experta en Derecho Penal, Silvana Tapia advirtió sobre la vulneración de algunos derechos fundamentales por parte de las fuerzas de seguridad.

Durante una entrevista para el programa Enclave Política, transmitido este lunes por TeleSUR, Silvana Tapia afirmó que ante una situación de conmoción interna no se suspenden los derechos humanos elementales ni las garantías básicas. Indicó que desde la declaración de conflicto armado interno, se ha observado que las fuerzas militares no se están empleando contra los cabecillas de las bandas y grupos criminales.

También comentó que no se está teniendo en cuenta sobre los indicios de las vinculaciones de las mafias internacionales con elementos de los gobiernos ecuatorianos.

Para la experta en Derecho Penal el blanco de las fuerzas militares parecen ser jóvenes afroamericanos en barrios empobrecidos y también la población carcelaria.

“Hay una situación de grave vulneración de los derechos fundamentales, como la falta de alimentación, la ausencia de atención médica para miles de personas, fallas en el suministro de agua y esto ocurre contra la población penitenciaria que en su mayoría no pertenecen a grupos del crimen organizado”, dijo.

Silvina Tapia recordó que las poblaciones y sectores más vulnerabilizados son los que terminan pagando los costos de las guerras y de esta ofensiva militar.

Sobre la posibilidad de militarizar al país para hacer frente a los grupos criminales, la experta sostuvo que esta medida no representa una solución a la problemática y puso como ejemplo los ocurrido en Colombia y México, donde la violencia se incrementó debido a la presencia militar.

En relación al derecho internacional humanitario en medio de la situación de inseguridad que atraviesa Ecuador, Silvana Tapia indicó que durante la existencia de un conflicto armado interno, rigen en teoría las normas que se refieren a los crímenes de guerra y podría suscitarse una responsabilidad penal internacional, si es que violan las normas del derecho penal humanitario que tiene por objetivo proteger a la población civil.

Para Tapia resulta extraño que el Gobierno haya considerado como fuerzas beligerantes no estatales a grupos y bandas del crimen organizado.

La experta expresó su preocupación por la polarización extrema particularmente en las redes sociales y por la validación o legitimación en la ciudadanía de discursos que rayan en lo fascista.

En su opinión, los comentarios fascistas acusan a poblaciones de no ser humanas y de no estar capacitadas para reclamar cuestiones de dignidad básicas, lo que para la experta es una situación que no se puede permitir.

Al ser consultada sobre la situación penitenciaria en Ecuador, Silvina Tapia explicó que las masacres carcelarias ocurridas antes del 2021 habían dado señales de la pérdida del control por parte del Estado ecuatoriano sobre los recintos carcelarios. “El Sistema Penitenciario ya es un sistema que funciona por fuera de la ley y por fuera del Estado”, agregó.

Según la experta en Derecho Penal, las cárceles están organizadas de acuerdo a la banda del crimen organizado que pertenecería el presunto detenido, obligando a los reos que no están ligados a organizaciones criminales a someterse a vejaciones contra su dignidad.

Para Tapia, se debe alertar cuando las medidas de supuesta seguridad son cortinas de humo, cuando encierran el potencial de agravar la situación, cuando ponen en riesgo a personas que tienen pocas posibilidades de ponerse a salvo.

Dijo que las zonas más abandonadas por el Estado son a su vez las más expuestas, al ser sistemáticamente reducidas por medio de la política de la reducción del gasto público, ocasionando que haya muy poca capacidad de respuesta por parte de las autoridades.

La experta argumentó que a través de la reducción del gasto público se termina con mucha población abandonada, con un sistema educativo ineficiente, un sistema de salud colapsado.

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