Mientras el gobierno niega que haya un “fracaso económico”, sigue la devaluación y la divisa estadounidense vuelve a dispararse. Se vende a un récord de 41 pesos en la city porteña. Para contener la corrida, el Banco Central subió la tasa de interés hasta un 60 por ciento.
Apenas una hora después de que abriera el mercado, el dólar volvió a repuntar y se vendió en bancos y casas de cambio a 35,79 pesos, 29 centavos más que ayer. La trepada siguió y llegó a ofrecerse al récord de 40 pesos.
Para contener la corrida, el Banco Central anunció una suba de su tasa de interés de referencia hasta un altísimo 60 por ciento, lo que hizo retroceder un poco la cotización hasta 39 pesos. Pero pasado el mediodía la disparada se reactivó y el dólar cotiza en torno a los 41 pesos.
El intento del gobierno por tranquilizar los mercados no dio sus frutos y minutos después de que el jefe de Gabinete Marcos Peña saliera a intentar calmar la corrida, el mercado le dio otra vez la espalda. “Tenemos que seguir trabajando. No creemos estar ante un fracaso económico ni mucho menos. La Argentina va a salir adelante y más fortalecida… lo dicen todos los indicadores”, afirmó Peña esta mañana, que descartó un cambio de gabinete ya que no “hay soluciones mágicas por esa vía”. Los mercados tampoco lo escucharon.
Ayer, al registrarse el séptimo día consecutivo de subas, el Banco Cental intentó contener la corrida, pero los 300 millones que subastó no alcanzaron para calmar al mercado y el dólar cerró en 35,50. Tampoco las palabras del presidente Mauricio Macri, quien anunció un nuevo acuerdo con el Fondo Monetario Internacional para que adelante los desembolsos del crédito por 50.000 millones de dólares.
Tasa de emergencia
En medio de la corrida cambiaria, el Banco Central anunció una brutal suba de la tasa de referencia, que pasa a ubicarse en un 60 por ciento, quince puntos por arriba de la actual. La decisión se completó con un aumento en 5 puntos porcentuales los encajes, integrables con pesos, LELIQ o NOBAC.
A pesar de que el 13 de agosto el titular del Central Luis Caputo aseguró a través de un comunicado que no se volvería a modificar la tasa hasta octubre, al situarla en un ya elevado 45 por ciento, el Central volvió a recalcular. El BCRA explicó que la decisión se tomó en una reunión de urgencia “en respuesta a la coyuntura cambiaria actual y ante el riesgo de que implique un mayor impacto sobre la inflación doméstica”.
«Acentuar el control de la liquidez en el mercado de dinero sigue siendo fundamental para reforzar el compromiso anti inflacionario de la entidad», consideró la autoridad monetaria. A la vez, aseguró que «la decisión sobre los encajes no alterará las excepciones y franquicias existentes» y «tampoco afectará a aquellas cuentas y depósitos denominados en Unidad de Valor Ajustable (UVAs) o en moneda extranjera».
Caputo se había comprometido a mantener estos niveles de tasa al menos hasta diciembre. Hace apenas tres semanas y media había dicho lo mismo, en medio de la batería de medidas anunciadas por el gobierno para frenar la corrida e intentar llevar algo de calma a los mercados.
Además de elevar la tasa de un 40 a un 45 por ciento, en ese momento se revisó la política de subastas de divisas con reservas y de licitaciones de lebacs. Se lanzó un plan para acelerar la disminución del del stock de Lebac cercano al billón de pesos, una deuda equivalente al 84 por ciento de la base monetaria y el Ministerio de Hacienda anunció que suspendería el pedido al Central para licitar en forma diaria 50 millones de dólares del préstamo del FMI.
Página/12