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El Cuerpo Médico Forense estableció que Claudio Herz, el hombre que amenazó a la vicepresidenta Cristina Fernández de Kirchner en la puerta del Instituto Patria, «no se encuentra en condiciones psíquicas de ser sometido a proceso», según surge de un informe entregado ante el juez federal del juez Daniel Rafecas.
«En función del examen realizado y los antecedentes recabados es verosímil que el causante por alteración morbosa de sus facultades mentales no haya podido, al momento de los hechos que se le imputan, comprender la criminalidad del acto ni dirigir sus acciones», dice el informe de tres páginas al que accedió Télam.
Se trata de una «ampliación del informe pericial» solicitado respecto de Herz, quien en octubre pasado fue procesado por los delitos de «amenazas» e «incitación a la violencia colectiva», en el marco de la causa en la que se lo investigó porque en julio de 2022 se paró con un megáfono frente a la sede del Instituto Patria y amenazó con la «horca» a la vicepresidenta.
De aquella manifestación participaron poco más de 15 personas entre los cuales estaban -según surge de registros periodísticos- los referentes de la agrupación Revolución Federal procesaos en el marco de otro expediente.
La ampliación del informe pericial había sido solicitada por el juez Rafecas, a instancias de la defensa oficial, por lo que el magistrado ahora deberá correr vista de los resultados a la querella y a la fiscalía, tras lo cual -y atendiendo las opiniones de las partes- podría declarar inimputable al acusado.
En las conclusiones del informe pericial se indicó que Herz «presentó sus facultades mentales descompensadas» y que «su cuadro orienta a un síndrome delirante con condicionamiento de su conducta y posibilidad de conductas de desajuste».
Allí también se afirmó que Herz «sufre una afección psíquica que compromete su capacidad de comprensión» y que «su capacidad judicativa se encuentra desviada», además que presentó «dificultad para adaptarse a la entrevista por suspicacia y reticencia».
En octubre pasado Rafecas procesó a Herz por medio de un fallo de 27 páginas en el que sostuvo que «el dolo exigido» para tomar esa decisión surgía de las propias manifestaciones de Herz que «tenían la fuerza de incitar a la violencia colectiva», a la vez que remarcó que se trató de expresiones «dirigidas a generar violencia».
Los hechos tuvieron lugar en la tarde del 21 de julio, cuando un grupo de personas se convocó en la puerta del Instituto Patria, en Rodríguez Peña 80 de la ciudad de Buenos Aires, para proferir insultos y amenazas a la vicepresidenta, además de dañar las instalaciones.
Herz se apersonó en el lugar de los hechos «megáfono en mano, para asegurarse que su mensaje llegue a su destinataria» y allí «expresó una serie de amenazas concretas, las cuales, por su contenido, forma y modo de expresión, es evidente que generan un claro amedrentamiento», sostuvo Rafecas cuando lo procesó.
«Ahora te toca la horca, el único camino para deshacernos de vos, de todos tus cómplices, tu hijo y toda la basura que nos gobierna, eso es lo que te vamos a hacer, te vamos a sacar a patadas en el culo» y «te vamos a ahorcar acá adelante del Instituto Patria o si no delante del Senado», fueron algunas de las amenazas que Herz profirió a la vicepresidenta y a su familia.
«Los vamos a buscar con ametralladoras para liquidarlos en el momento y ahorcarlos, ahorcarlos por todo lo que nos hicieron, durante años, estamos padeciendo desde el 2003», fue otra de las frases que lanzó el procesado.
La causa se inició a partir de una presentaciones realizada por el apoderado del Instituto Patria, Fernando Castiglioni, y, mediante filmaciones registradas en el lugar se identificó a Herz como quien profería amenazas a través de un megáfono.
