El Lobo, dolorido y golpeado, se prepara para la gran final del viernes

Los jugadores y el cuerpo técnico de Gimnasia y Esgrima de Jujuy ya están preparando lo que será el gran final de año, que puede ser glorioso o vergonzoso, cuando este viernes, desde las 20.15 horas, se enfrente a Nueva Chicago para conseguir el último boleto que lleva a la primera división del fútbol argentino.

Los hinchas del Lobo tienen que tener en cuenta que el grupo está muy dolorido y golpeado, luego de perder tres oportunidades para ascender, una ante el rival de Mataderos y dos ante Aldosivi. Hoy por hoy, todos tienen que buscar las fuerzas de donde sea para levantarse y conseguir el tan ansiado ascenso que quiere casi toda la provincia.

Los dirigidos por Mario Sciacqua ya hace tiempo vienen jugando muy mal, exactamente desde que entraron en la recta final, el Torneo de Transición. Esta situación generó que en el último partido del campeonato y el primero del triangular, el Tiburón se comiera al Lobo.

Desde muchos aspectos, los jugadores no encuentran respuesta a la actualidad que vive el plantel. Juega mal, por momentos muy mal, y las derrotas ante Aldosivi calaron muy hondo. Los intentos fracasados de celebrar temprano el ascenso golpearon fuerte e incluso hicieron mella en el juego que había desplegado Gimnasia hasta ese momento, ese juego que lo convirtió en una de las mayores atracciones del campeonato.

Sciacqua prepara cambios. La molestia muscular en el isquiotibial derecho sigue afectando a en Sebastián Ereros, por lo que está en duda. El regreso (el segundo) de Leonardo Ferreyra fue un fracaso, hasta hizo perder un cambio. En los dos partidos que ingresó el defensor, donde solo jugó 45 minutos en cada uno, nunca rindió. Además, el entrenador lo ubica de marcador de punta, cuando es más carrilero que Diego López.

Miércoles y jueves toca práctica de fútbol, donde el entrenador buscará las modificaciones, para cambiar la imagen del equipo. Podría haber cambio de jugadores y de tácticas.