Otra vez, Gimnasia y Esgrima de Jujuy ganó en casa, la sexta vez que convierte tres goles y sigue soñando con la clasificación al Reducido, pero cuando viaja fuera de la provincia, da lástima, porque pierde seguido, a veces empata, casi nunca puede traerse los tres puntos para Jujuy. Sólo ganó un solo partido, hasta ahora, fue ante Riestra y con goleada 4 a 0.
Gimnasia tiene dos objetivos en lo que queda del año: Eliminar a Banfield en la Copa Argentina y clasificar a los cuartos de final y el otro, no menos importante, ubicarse entre los 13 mejores equipos del campeonato y jugar por el segundo ascenso a la Liga Profesional de Fútbol. Ambos difíciles, complicados, pero no imposibles.
En la jornada pasada, venció a Quilmes por 3 a 1 con goles de Rebecchi, Reali y Maidana, había empatado para el equipo cervecero, Tevez. Con la victoria de ayer, el Lobo logro 19 puntos, de los 21 posibles. Muy buena campaña de local y paupérrima de visitante.
Ahora viaja a Mendoza, para jugar contra Independiente Rivadavia, el próximo lunes a las 16 horas y para ese encuentro, el técnico del equipo, Darío Franco recupera a Matías Palavecino, uno de los mejores jugadores del Lobo en la temporada, con lo cual, y hasta el momento, el entrenador dispondrá de todo, para conseguir el segundo triunfo, fuera de la provincia, en lo que va del torneo.
A partir de mañana, se empezará a trabajador con vistas a ese trascendental encuentro, que será dirigido por Nelson Bejas.
El Lobo sabe perfectamente si quiere jugar la segunda etapa del campeonato, deberá empezar a sumar de a tres, con el objetivo de clasificar.