El Ministerio de Educación cerró cuatro secundarios para jóvenes y adultos 

La Resolución 8611 fechada el 2 de marzo, con la firma de la ministra de Educación, Isolda Calsina, dispone el cierre de los cuatro Centros de Educación Integral para Jóvenes y Adultos (Ceija) que funcionan en la provincia, por irregularidades administrativas. La suspensión de las actividades se hizo efectiva este jueves, en medio de las protestas de docentes y alumnos.

El año pasado, el ministerio no pagó los sueldos docentes, argumentando que se trata de instituciones de gestión social y privada. En efecto, son establecimientos que gerencian sindicatos y organizaciones sociales y que daban la posibilidad a estudiantes que no pudieron completar esa etapa a los 17 años de terminar la secundaria en dos ciclos (1°, 2° y 3° en el primero, y 4° y 5° en el segundo), con funcionamiento en dos turnos. La mayoría de los que asisten a los Ceija son adultos, tienen familia a cargo, deben trabajar muchas horas, son mujeres embarazadas o cualquier combinación entre estas variantes.

En la provincia funcionan cuatro Ceija que brindan el servicio educativo a un total de 1200 alumnos y emplean a cerca de 70 trabajadores. Además del de San Salvador de Jujuy (ubicado en José de la Iglesia al 1700), están los de Palpalá, San Pedro y La Quiaca.

Frente al cierre dispuesto este jueves, los docentes denuncian que para este ciclo lectivo se cumplió con todos los requisitos y se logró la habilitación de los establecimientos. De hecho, el 26 febrero se redactó un acta donde la coordinadora de Instituciones de Gestión Privada, Elsa Torfe; el supervisor general Juan Carlos Sánchez, y la asesora legal del Ministerio, Gabriela Castro, hablitaban el funcionamiento de los Ceijas. Son los mismos funcionarios que hoy disponen el cierre.

Así es como las clases comenzaron en fecha, con cerca de 300 alumnos inscriptos. Hoy recibieron la comunicación oficial del cierre de los establecimientos, sin que se ofreciera ninguna alternativa para que sigan estudiando.

«Ya pasaron casi tres semanas de clases, pagamos las inscripciones y las cuotas, y nos dicen que cierran. Acá los padres de los alumnos no son empresarios, somos todos humildes y estamos laburando para poder paganos los estudios. Necesitamos que nos solucionen esto porque queremos seguir estudiando», dijo a El Submarino Radio (91.5) José, uno de los alumnos del Ceija Idear Región III, que funciona desde 2005.

Pero no solo los alumnos están preocupados. Los directivos los apoyan y por eso reclaman que el ministerio ofrezca alguna alternativa para que estos estudiantes puedan completar el secundario con una modalidad similar, tanto en relación a la duración reducida del ciclo como a la distribución por turnos.

«Nos quieren mandar a otras nocturnas que tienen otra modalidad de cuatro años, pero elegimos venir aquí porque tenemos la posibilidad de terminar en dos. No somos vagos; si fuéramos vagos estaríamos en nuestra casa, pero nosotros queremos estudiar, por eso estamos aquí», afirmó José.

 

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