La comunidad religiosa y educativa del Colegio Nuestra Señora del Huerto se siente molesta y enojada, luego de advertir que el mural que se pintó hace tan solo ocho meses en el paredón lateral del polideportivo de la institución, fue dañado con dibujos que agravian la imagen religiosa, bigotes y anteojos oscuros.
Una vez más, murales, estatuas, esculturas, sufren el daño, casi a diario, la actuación de ciertos hombres y mujeres en contra de las obras que buscan embellecer la ciudad capital y otras del interior de la provincia.
Esta vez, la agresión contra el mural del Colegio Nuestra Señora del Huerto, produjo enojo y malestar en la grey católica y otros sectores de la comunidad.
El mural se había realizado dentro de los 140 años de vida de la institución que se conmemoraron en septiembre del año pasado, y contó con la intervención de toda la comunidad educativa, el profesor Darío Medina y el artista Alejandro Condorí.