Tras la adjudicación del ingenio La Esperanza al grupo colombiano Omega, que pagará 86 millones de pesos por la empresa, el Sindicato de Obreros y Empleados Azucareros del Ingenio La Esperanza (Soeaile) se manifiesta confiado en la nueva etapa. El secretario general, Sergio Juárez, comentó a El Submarino Radio (91.5) que desde el gremio apoyaron la propuesta de este grupo porque se comprometió a mantener a los 600 trabajadores que quedaron y reconocerles las condiciones laborales y la antigüedad, y que eso quedó reflejado en la resolución del juez de la quiebra.
-¿Cuál es la posición del gremio con respecto a la venta del Ingenio?
-La postura del sindicato siempre fue muy clara, que se nos respete a los 600 trabajadores que quedamos, tanto en las condiciones de trabajo como en la antigüedad. Eso está escrito en la resolución del juez de la quiebra. Es lo que nosotros buscamos y se logró ese objetivo. Era necesario que después de 18 años hubiera un dueño del ingenio, porque era insostenible estar con el gobierno. El mismo gobernador dijo que no iba a poner un peso más en el ingenio, y eso lo hemos sufrido, ha castigado duramente a los trabajadores.
-¿Qué diferencia había entre los dos oferentes?
-Además del grupo colombiano se presentó uno tucumano. El tucumano nos decía que se extinguían todos contratos de trabajo, y los colombianos decían que mantenía a los 600 trabajadores con su antigüedad. Entonces el sindicato optó por los Colombianos y puso un granito de arena para que el grupo Omega llegue al ingenio La Esperanza.
-El juez puso un precio de 86 millones de dólares. ¿Ustedes creen que es un precio justo?
-No. Nosotros sabemos que no es un precio justo, y también sabemos que se violó la ley de quiebras, que no llegaron a poner lo que dice el artículo 205 de la ley de contrato de quiebra. Pero bueno, necesitábamos que alguien venga a invertir. Tampoco se hicieron las tasaciones de cuanto valía realmente el ingenio. El otro grupo solo ofrecía 20 millones, menos de lo que costaba hace ocho años. Se hicieron mal las cosas; nosotros siempre lo hemos denunciado. Pero ya está, se cerró una etapa difícil. Dios quiera que comience otra etapa para la familia azucarera y para San Pedro.
-¿Ya se reunieron con los ejecutivos de Omega?
-Sí, hemos hablado tres o cuatro veces con Omar Leal. Hoy está en el ingenio, recorriendo. Nos hemos juntado en el hotel hace más de seis meses cuando vinieron con una comitiva, y nos explicaron el proyecto. Dios quiera que se llegue implementar el proyecto que tienen, porque eso va a crear fuentes de trabajo en la microrregión y va a haber mano de obra para los hijos de los trabajadores.
-¿En qué consiste el proyecto?
-Ellos quieren ver el tema de la nueva deshidratadora, el tema del biocombustible. Es fundamental que eso empiece a trabajar ya. Y están también el tema de la papelera y el de la plantación de caña, que en este momento es de 8 mil hectáreas pero llegaríamos a 12 o 13 mil. Eso es fundamental para el año que viene.