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El Tercer Malón de la Paz realizó la ceremonia de la Pachamama frente a la sede de la Corte Suprema de Justicia, tras llegar este martes a la Ciudad de Buenos Aires luego de una semana de recorrida desde la puna de Jujuy. Representantes de unas 400 comunidades originarias reclaman que el máximo tribunal del país declare inconstitucional la reforma de la Carta Magna jujeña aprobada el pasado 20 de junio.
Integrantes de los pueblos Atacama, Colla, Quechua, Chicha, Omahuaca, Fiscara, Tilián, Ocloya, Queta y Guaraní de Jujuy exigen también que el Congreso «tome las medidas para la intervención federal de la provincia por violencia institucional».
La entrada a la Ciudad de Buenos Aires tuvo su primera parada en la plaza Miserere, desde donde las comunidades, acompañadas por organizaciones sindicales y sociales, marcharon hasta el Obelisco y luego hasta la plaza Lavalle, frente a la sede de la Corte Suprema de Justicia de la Nación. Allí, realizaron la ceremonia de la Pachamama, como cada 1° de agosto en Jujuy.
HISTÓRICO!
El Tercer Malón de la Paz llegó a CABA y van a acampar en la Corte Suprema de (in)Justicia de la Nación.#MalonDeLaPaz
. pic.twitter.com/xfiT2pYBTe— Les jóvenes (@Les_jovenes) August 1, 2023
Representantes de pueblos de diversos puntos de la provincia tomaron la palabra para reafirmar la voluntad de sostener el reclamo, sintetizado en la consigna principal: «Arriba los derechos, abajo la reforma».
«Vinimos a pedirle a la Justicia de la Nación que se expida sobre la reforma constitucional en la provincia de Jujuy. Algo que hemos planteado en la provincia misma, pero al no tener respuesta hemos tomado la decisión de caminar hasta Buenos Aires», dijo Armando Quispe, referente de la Comunidad Queta.
Durante la ceremonia de la Pachamama que se realizó frente a la Corte, los comuneros le reclamaron directamente al presidente Alberto Fernández que intervenga Jujuy. El representante de la comunidad de Cusi Cusi apuntó hacia jueces, diputados y senadores: «No sé qué parte no entienden -interpeló-. Sólo tienen que cumplir con la ley. Es la hora de intervenir la provincia en sus tres poderes. Es la hora de salvar a Jujuy. ¿Qué pasa, señores?»
«Es un hecho impresionante lo que estamos viendo, cuadras y cuadras de gente», describió Quispe en diálogo con El Submarino Radio (FM Conectar 91.5) mientras avanzaba por la avenida 9 de Julio.
Sobre el clima que se vivió durante el recorrido del Tercer Malón de la Paz, contó: «Estamos exponiendo a un precandidato a la vicepresidencia, y hemos palpado a lo largo de todo el camino el rechazo, la mirada, estar permanentemente vigilados, sentirnos como perseguidos por determinados personajes que seguramente responden a sus intereses».
La presencia del Malón en la Ciudad de Buenos Aires, territorio de Horacio Rodríguez Larreta, compañero de fórmula de Gerardo Morales en las PASO del 13 de este mes, le imprime un sentido adicional a la protesta. «Sabemos sus objetivos políticos, de qué lado están, a qué modelo pertenecen, y sabemos que siempre han hecho uso de la fuerza para tratar de aplacar a la sociedad, para anular los ideales. Así que no sería nada raro que lo volvieran a hacer», reflexionó Quispe.
✊🏻 En la Plaza Lavalle, frente al Teatro Colon, se hace una ceremonia ancestral donde las distintas comunidades comparten ofrendas para homenajear en su día a la Pachamama. #Jujuy pic.twitter.com/ybWiCaDqw9
— lavaca tuitera (@Lavacatuitera) August 1, 2023
«Es necesario que la justicia nos escuche», reclamó Néstor Jerez, cacique del pueblo Ocloya, y agregó: «Jujuy es un experimento de laboratorio de saqueo y represión. El gobernador Morales quiere instalarlo a nivel nacional, por eso queremos llevar el mensaje al pueblo argentino que sepa lo que se está por venir y que es necesario que salgamos a expresarnos».
En este sentido, Jerez señaló a la agencia Télam que «hoy tenemos dos modelos totalmente opuestos: uno basado en el exterminio, en el saqueo, el extractivismo y el daño irreversible a la madre tierra, y otro que es nuestra política del buen vivir, de convivir en armonía con la biodiversidad, garantía de vida de toda la humanidad».
En tanto, para Herminda, de la comunidad de Chaupi Rodeo y Peñablanca, «esta marcha es la continuidad de la lucha de nuestros abuelos, porque todavía hoy, a 70 años del primer malón de la Paz, nos siguen saqueando nuestros territorios».
Un ejemplo lo lleva en carne propia José Pablo Rosado de la comunidad de Collasuyo en la localidad de Perico: «Pertenezco a la finca El Pongo donde Gerardo Morales plantó marihuana y le dio a su hijo 99 años la posesión de las tierras quitándonos a los originarios, por eso vengo a reclamar, para que el presidente Fernández trabaje por nosotros», relató.
Las comunidades de Jujuy, acompañadas por representantes de pueblos originarios de las provincias que atravesaron durante la última semana, están determinadas a quedarse en la Ciudad de Buenos Aires hasta obtener respuesta a sus reclamos. «Es como los cortes de ruta -explicó Armando Quispe-. Si el gobierno escucha y pone la predisposición, no sólo desde el discurso y la mentira, sino realmente con hechos, esto se puede terminar en uno, dos o tres días. Todo depende de ellos, de la voluntad de cada una de las instituciones».
