“No sé cuál es la situación con las demás empresas –dijo Castelli-, pero en el caso de Santa Ana hay una deuda con el municipio por la que hicimos un convenio hasta el 31 de diciembre: nosotros no recibimos un peso del BEGU y se va saldando nuestra deuda”.
El empresario dijo además que esta situación deudora se repite en todas las empresas, a partir de obligaciones como patentes, el canon anual y multas, entre otros ítems. En el caso de Santa Ana, explicó, hasta que no se cancele esa deuda el balance queda a favor del municipio.