En el G77, Díaz-Canel llamó a que el Sur “cambie las reglas de juego”

El presidente cubano Miguel Díaz-Canel indicó que “le toca al Sur cambiar las reglas del juego”, al inaugurar la cumbre del G77+China en La Habana, que también contó con palabras del secretario general de la ONU, António Guterres, quien dijo que “los sistemas y los marcos mundiales» le están «fallando» a los países en desarrollo.

El acto comenzó con un discurso en video de Fidel Castro de 2000, cuando en la inauguración de la I Cumbre Sur dijo que “nunca antes la humanidad tuvo un potencial científico-técnico tan formidable y nunca antes fue tan desigual”.

Al tomar la palabra, Díaz-Canel dijo que la situación sigue vigente, más de dos décadas después: “Esta cumbre llega en momentos en que la humanidad alcanza un potencial científico y técnico con una capacidad de generar riqueza y bienestar en condiciones de mayor igualdad, equidad y justicia. Podía asegurar niveles de vida dignos para casi todos los pobladores del planeta”.

“El sur también existe, dicen los versos del poeta uruguayo Mario Benedetti. Por todo el tiempo que el norte acomodó al mundo de acuerdo a sus intereses para el mal del resto, ya toca al sur cambiar las reglas de juego”, apuntó en el Palacio de Convenciones, sede del encuentro que tendrá lugar este viernes y el sábado.

Díaz-Canel estuvo acompañado en la inauguración por el exmandatario Raúl Castro, mientras que en la sala escucharon sus palabras los jefes de delegaciones de más de 100 países, entre ellos el presidente argentino, Alberto Fernández.

En su alocución prometió que la declaración, que se oficializará el sábado, producirá “resultados tangibles” y citó al expresidente venezolano Hugo Chávez cuando dijo “que los presidentes andan de cumbre en cumbre y los pueblos de abismo a abismo”.

El líder cubano mencionó además que los 134 países que forman parte del G77 son las “víctimas principales de actual crisis multidimensional”, entre las que incluyó “los desastres cíclicos del comercio y las finanzas internacionales, los efectos del cambio climático y el agotamiento de los recursos naturales”.

“Exigimos ya la democratización pendiente del sistema de relaciones internacionales. Son los pueblos del sur los que más padecen hambre, miseria, muerte por enfermedades curables, analfabetismo, desplazamientos humanos y otras consecuencias del subdesarrollo”, manifestó.

“Muchas de nuestras naciones son llamadas pobres cuando deberían considerarse naciones empobrecidas”, añadió.

Por su parte, Guterres indicó que los países del Sur Global “están enredados en una maraña de crisis mundiales” y enumeró: “La pobreza y el hambre van en aumento, los precios están disparados, la deuda es desorbitante y los desastres climáticos son cada vez más frecuentes”.

“El mundo les está fallando a los países en desarrollo”, dijo.

En el ámbito del sistema multilateral reconoció que «muchas instituciones mundiales actuales» reflejan «una época pasada» y destacó la necesidad de actualizar el Consejo de Seguridad de la ONU, el Fondo Monetario Internacional y el Banco Mundial.

En lo económico, pidió «justicia financiera» y «medidas urgentes» porque hay «muchos países incapaces de hacer frente al servicio de la deuda» por los efectos de la pandemia, la inflación global y «el impacto de los fenómenos climáticos extremos».

Por Camil Straschnoy, en Télam

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