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En una sala vacía y fría, los represores se defienden en la última etapa de alegatos

Hoy finaliza la etapa de los alegatos, con el turno de las defensas de los seis represores que están siendo juzgados por delitos de lesa humanidad cometidos en Jujuy. Los organismos de derechos humanos no participan de la audiencia, dejando en la sala solamente las fotos de los detenidos desaparecidos y los pañuelos blancos. 

Desde las 9 de la mañana, los letrados Matías Rodríguez Perea, Luis Cazares y Carlos Rodríguez Vega exponen sobre la situación de los cuatro exmiembros del servicio penitenciario y los dos exintegrantes del Ejército Argentino.

 Dos semanas atrás, los abogados querellantes y el Ministerio Público Fiscal solicitaron en sus alegatos ante el Tribunal Oral Federal N° 1 se condene a perpetua a Carlos Alberto Ortiz, Ricardo Orlando Ortiz, Mario Marcelo Gutiérrez, Herminio Zárate, Antonio Vargas y César Darío Díaz, por los delitos de “homicidio doblemente calificado agravado”; “privación ilegítima de la libertad agravada por la violencia y fuerza”, y tormentos agravados por dos o más personas y abuso sexual.

 También pidieron que a los seis represores se les amplíe la acusación por el delito de violencia sexual, en el marco de la Ley de Violencia de Género.

 En este segundo juicio por los crímenes de lesa humanidad se juzga a los responsables del padecimiento y destino de los detenidos desaparecidos Dominga Álvarez de Scurta, Osvaldo José Garibaldi, María Alicia del Valle Ranzoni, Juana Francisca Torres Cabrera, Pedro Eduardo Torres Cabrera, Jaime Lara Torres y Jorge Turk Llapur.

 Todos fueron detenidos ilegalmente los últimos días de mayo de 1976 y sacados del penal el 10 de junio del mismo año por el comisario Ernesto Jaig y por el imputado César Díaz, sin que se supiera de ellos hasta la fecha, con excepción de Álvarez de Scurta, cuyo cuerpo fue enterrado como NN en el cementerio de Yala y exhumado el 5 de enero de 1984. 


 

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