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Siete personas llegaron a Jujuy desde Miami, y tal como dispuso el Comité Operativo de Emergencia, fueron trasladadas desde el aeropuerto de Salta directamente a un hotel del centro de la ciudad para que se queden allí por dos semanas cumpliendo con el aislamiento obligatorio. Una de esas personas se negó, levantó la voz y amenazó con presentar un hábeas corpus en su favor. Quería irse a su casa.
La historia sería una más de tantas que se desarrollan en todo el país por estas horas, si no fuera que la mujer en cuestión es nada menos que María Silvia Bernal, vocal del Superior Tribunal de Justicia de la provincia. Al final terminó aceptando, pero en su curriculum quedará estampada su falta de responsabilidad.
La magistrada había llegado junto a otras seis personas en un trafic, desde Salta, adonde habían llegado en un vuelo desde Miami. Sin escala, el grupo fue trasladado a un hotel ubicado en la avenida 19 de Abril, en San Salvador de Jujuy. Allí permanecen custodiados por efectivos de la Policía de la Provincia y serán sometidas a los tests correspondientes.
En diálogo con los medios, la comisario Luciana Ríos, comentó que el traslado al hotel se realizó de acuerdo al protocolo dispuesto por el COE provincial. Sobre el episodio con la jueza, matizó: «No fueron inconvenientes en sí. Son personas que quieren llegar a sus domicilios luego de un viaje».
«La idea es que ellos entiendan que tienen que acatar estos protocolos de seguridad y tienen que permanecer en aislamiento, hasta que se decida otra cosa -completó la comisaria-. Vamos a tener custodia por ahora de manera preventiva, pero creemos que no será necesario extenderla más porque se trata de una cuestión puramente sanitaria. Y una responsabilidad de conciencia civil».
La actitud de la jueza Bernal provocó numerosos repudios en las redes sociales.
