Entre los participantes, estaba el diputado provincial del FuyO, Juan Manuel Esquivel, quien aseguró a la prensa que, luego del alejamiento de Germán Noro del bloque, “éste debería renunciar a la Cámara de Diputados y devolver la banca a los compañeros del espacio, que la reclaman”.
Esquivel recordó: “Germán Noro fue frente a los miles de compañeros de la organización casi un niño mimado que ingresó a la legislatura por los votos de la Tupac Amaru. No encabezó nunca una lista y en la elección del 2013 obtuvo una banca de la mano de Milagro Sala. Hoy nos embarga la tristeza por su decisión inconsulta. Si fuera hombre de bien tendría que haber hablado con la conductora de la organización Tupac Amaru, que además es la presidenta del partido. Y por supuesto debería haber renunciado y desde el llano haber construido, como él dice, con la gente. Hoy es fácil llevarse una banca y venderla al mejor postor. Perdió en todos los lugares donde estuvo sumado, tuvo esta oportunidad en la Tupac Amaru y ahora se lleva la banca para un grupo de peronistas disidentes, que esta con el gobierno. Nos parece un triste y solitario final para este hombre de la política, como él se define, que hoy se sienta con los carceleros de Milagro”
En ese marco, Esquivel explicó: “el grupo de Llano, Lops y González, disidentes del propio Partido Justicialista, han levantado sistemáticamente las manos a todas las leyes del gobernador Morales, desde la conformación del Superior Tribunal de Justicia en adelante. Noro reconoce como presidente del partido a Carlos Haquim, quién es miembro del Poder Ejecutivo y presidente de la Cámara de Diputados, y entendemos que ellos son la que la tienen como presa política a Milagro Sala”.
Respecto al reclamo de Noro sobre la falta de autocrítica dentro del espacio, como uno de los motivos que, según expresó, lo llevó a tomar la decisión adoptada, Esquivel explicó: “Milagro fue privada ilegalmente de su libertad apenas asumió este gobierno y desde allí no hemos tenido asambleas para tratar estos temas. Las únicas asambleas que tuvimos previas a su detención tuvieron que ver con el trabajo de las organizaciones que nos parecía más urgente que los análisis políticos. Uno no puede hacer análisis político con hambre en la panza y falta de sueldos”.