El Superior Tribunal modificó un fallo por el femicidio de Carola Carretero, sucedido en el 2005 y revocó sobreseimiento y condenó a tres gendarmes. También confirmó la sentencia a 25 años de prisión a otro gendarme, que fue acusado del crimen de la mujer, que también era integrante de la fuerza de seguridad.
La mujer fue asesinada por Roberto González en la casa que su atacante compartía con su novio, ausente al momento del homicidio.
González juzgado inicialmente por el delito de “homicidio calificado por alevosía”, había sido beneficiado a mediados del corriente año con una reducción de la pena por parte de la Cámara de Casación Penal en 10 años de la pena correspondiente.
Pero la querella presentó un recurso de inconstitucionalidad ante la Corte de la Provincia, que no solo ratificó la condena de primera instancia, también condeno a otros tres gendarmes involucrados al momento del desenlace fatal.
El sobreseimiento sobre Diego Alberto Tapia, Agustín Castillo y Mario Antonio Olivares fue revocado considerándolos partícipes, los primeros por encubrimiento y en el caso de Olivares por falso testimonio.
En cuanto a la pareja de Carretero, Cristian Monje, imputado inicialmente como «partícipe secundario», el Tribunal ratificó su absolución.
Los hechos
Luego de pasar la noche afuera, Carretero regresó al domicilio del barrio Islas Malvinas junto a su pareja. Luego de una fuerte discusión que incluyó golpes, Monje abandona el lugar para incorporarse a sus labores en Purmamarca. Aprovechando el momento de debilidad, González atacó a la víctima con fines sexuales y ante la negativa de la misma, la atacó de manera alevosa, provocando la muerte por asfixia.
Aunque el femicida trató de disimular la escena, los peritajes policiales, testimonios de testigos, registros de llamadas y demás pruebas terminaron por esclarecer el «homicidio agravado por alevosía».