Cecilia Gisela Basaldúa, la mochilera que estaba desaparecida desde el 5 de abril último y fue encontrada asesinada el sábado cerca de la localidad cordobesa de Capilla del Monte, sufrió una muerte violenta, ya que su cuerpo presenta signos de estrangulamiento, según los primeros resultados de la autopsia.
Fuentes judiciales informaron que la fiscal de Feria de Cosquín, Jorgelina Gómez, comunicó que la «causa eficiente (de muerte) no se puede determinar todavía, pero se presume que se trataría de asfixia por estrangulamiento».
Los médicos forenses también detectaron que el cuerpo presentaba «heridas defensivas en distintas partes, cuya naturaleza y extensión deben ser complementadas con estudios anatomopatológicos y químicos, entre otros», precisó el informe del Ministerio Público Fiscal (MPF) cordobés.
Si bien la data de muerte no se pudo precisar, se estima que el crimen fue cometido más de siete días antes del hallazgo del cadáver.
En ese sentido, se llevarán a cabo estudios entomológicos, que analizan la fauna cadavérica, para establecer con exactitud cuándo murió.
En cuanto a la identidad de la víctima, las fuentes explicaron que, como es de rigor, se dispusieron estudios de ADN para certificarla, aunque por las características del hallazgo y los objetos personales encontrados todo indica que se trata de Basaldúa.
«Dijeron que era mi hija, que se encontraba en un cañadón, en un lugar muy inaccesible. Yo me ofrecí para ir al lugar y a la noche me confirmó la fiscal», indicó Danilo Basaldúa, padre de la víctima. La confirmación de la identidad también fue brindada en declaraciones a la prensa por Guillermo, el hermano de Cecilia.
A su vez, ayer por la tarde, las amigas de la víctima difundieron por las redes sociales un video con imágenes y dichos de ella bajo el hashtag «#justiciaporcecilia».
Basaldúa, de 35 años, fue vista por última vez el 5 de abril último en la localidad cordobesa de Capilla del Monte, en el Valle de Punilla, cuando pasó por una casa para pedir agua.
La mujer, oriunda de Buenos Aires, viajaba como mochilera. También había sido vista en la zona denominada Tres Puentes de esa localidad, distante unos 110 kilómetros de la capital de Córdoba.
Algunas pertenencias de Cecilia se hallaron en la casa del hombre en la que se alojaba y otras en la zona de Tres Puentes. «Lo único que no se encontró es la riñonera con documentos», detalló Guillermo.
Durante la última semana, la fiscalía Cosquín había ordenado ampliar el radio de trabajo con más rastrillajes para intentar dar con el paradero de la mujer desaparecida, que se extendió en seis comunidades de la localidad de Charbonier.
También se hicieron relevamientos a través de la Dirección Nacional de Migraciones juntamente con la Comisión Nacional de Regulación de Transporte, a los fines de determinar si la mujer había viajado, aunque esas averiguaciones no arrojaron resultados.
En el marco de la investigación se realizaron también allanamientos de manera simultánea en dos inmuebles donde Basaldúa podría haber estado, pero tampoco se encontraron indicios, y tampoco fue detectada en ningún control preventivo por el aislamiento obligatorio en el marco de la pandemia por coronavirus.