El funcionario nacional respaló al gobernador Gerardo Morales resaltando su convencimiento de que Sala “no es una presa política”.
«Cuando hay un juez que aplica la ley y un tribunal dicta sentencia, no se puede hablar de presos políticos. Y eso es lo que sucedió esta semana con Milagro Sala», aseguró, aunque aclaró: «No puedo decir si estuvo bien o mal condenada; ahora vendrán los recursos y las apelaciones”.
Garavano señaló que los casos judiciales en los que está involucrada la diputada del Parlasur “no pueden quedar en un limbo”, y que se deben acelerar los procesos judiciales “para demostrar la inocencia o culpabilidad en la instancia de juicio oral”.