De cara a la cuestionada audiencia pública en la que se tratará este viernes el proyecto Eco Desarrollo Sostenible de los Diques, Víctor González, titular de la Agencia de Desarrollo Sostenible de los Diques, destacó en diálogo con El Submarino Radio (91.5) que alguna de la gente que vive en la zona está de acuerdo con el proyecto, y precisó que el gobierno provincial está buscando inversores para concretar la iniciativa.
El emprendimiento inmobiliario y turístico que se aprobó por ley en la Legislatura en diciembre último es cuestionado por la Organización Campesina de los Perilagos (OCP), que integra el Movimiento Nacional Campesino Indígena (MNCI), porque en la zona viven hace décadas familias que se dedican a la agricultura y la ganadería.
Para avanzar en el proyecto, la ley eliminó la categoría de Área Natural Protegida a la zona.
Al analizar las razones del rechazo del proyecto en buena parte de los pobladores, González comentó que quienes viven en el lugar hace mucho tiempo y la gente que se dedica a la cría de ganado son los que más se oponen, mientras que aquellos que tienen algún emprendimiento turístico es la que más a favor está. “Son diferencias de pensamiento. Nosotros les mostramos el proyecto, los hicimos participar y les mostramos de qué se trata”, relató.
“Esta es una zona donde no se puede criar ganado a gran escala, pero si lo que quieren es crear una minigranja, van a poder seguir teniendo esa actividad, pero confluyéndola con la parte turística”, señaló. Para el funcionario, de este modo “pueden a través de su cultura difundir el turismo de la provincia”.
Según explicó González, a los pobladores que aceptaron la propuesta el gobierno de la provincia les reconoce la tenencia de la tierra que tienen como posesión, y se la está pasando en propiedad. “Hay gente que tiene muchos terrenos, algunos tienen 16 hectáreas, otros tienen 40, pero con ellos todavía no hemos llegado a ningún avance, son los que más se están oponiendo a este desarrollo -detalló-. La idea es llegar a un acuerdo para que sigan haciendo el mismo tipo de ganadería y agricultura que hacen, pero en otro sector de la provincia. En realidad el proyecto todavía no incluye el lugar en el que están ellos, pero tienen todo su derecho a oponerse”.
Los que acordaron integrarse al proyecto, entonces, tendrán que iniciar alguna actividad destinada al turismo. “Pueden hacer senderismo, cabalgatas, recorridos, todo lo relacionado con la pesca -enumeró González-; todo lo que pueda ofrecer esta zona que es tan rica en lo natural”.
“Esto va a permitir que mejore la calidad de vida de la gente, porque van a tener servicios, agua potable y cloacas, porque no hay manera de hacer este emprendimiento si no hay cloacas, para no contaminar nuestro dique”, destacó.
-¿De donde sale el dinero para este proyecto?
-Estamos presentando esta propuesta a distintos inversores, para tener el financiamiento de las obras de agua potable, que van a costar 20 millones de pesos. Por eso el gobierno tiene que desarrollar este emprendimiento para recuperar y poder invertir en otras cosas. Para eso tenemos que demostrar que el proyecto es serio y que se va a concretar en un corto plazo.
-¿Están buscando inversores privados dentro del país, de la provincia o de cualquier lado?
-Estamos buscando en el país. Hubo gente de otros países que hicieron algún otro tipo de propuesta al gobierno porque conocieron el dique. La idea es que se conozca la zona de los valles en todo el país, y si puede ser para fuera, también.
-¿Cuánto tendría que poner el inversor?
-Todavía no lo sabemos, porque depende de lo que quiera hacer en la zona.
-El gobernador dijo que quiere armar en esa zona algo similar a Villa Carlos Paz. ¿En qué sentido?
-Habló de Villa Carlos Paz en cuanto a la cantidad de gente que pueda visitar, pero con un cuidado ambiental totalmente distinto a lo que pasa en Carlos Paz. Por eso se llama Eco Desarrollo; es algo donde confluye lo económico para la gente del lugar, más el cuidado ambiental y más la parte de desarrollo turístico. Es decir, que sea como Carlos Paz en lo que es como atractivo turístico, no así en lo que hace a la sobrecarga del terreno, la cantidad de casas que tiene, porque esto nos va a complicar en la parte ambiental.
-En las actas compromiso que firmó el gobierno con gente del lugar dice que tienen que achicar sus lotes. ¿Cómo es eso?
-En algunos sectores se van a tener que achicar, porque hay que abrir calles normales.
-¿Qué significa eso? Por ejemplo, si alguien tiene 30 hectáreas, ¿cuánto le queda?
-No, no hay gente que tenga esa cantidad de hectáreas, salvo dos o tres. La mayoría tiene una, dos o tres hectáreas. Justamente los que rechazan esto son los que tienen 42 hectáreas, pero son pocos. Y a la gente a la que no le va a pasar ninguna calle se le está reconociendo la totalidad del terreno.
-Al que le achican el lote ¿le dan algún beneficio?
-Las tierras que ocupan dejan de ser del estado y pasan a ser propiedad de ellos. Esto es lo más importante de todo. Hoy en día están como poseedores, entonces no pueden hacer ningún trámite porque no tienen la titularidad de la tierra. Esa es la principal inversión que hace el estado con esta gente. Luego se los va a capacitar en emprendimientos turísticos y se les van a poner todos los servicios, agua potable, cloacas y la luz en algunos sectores donde aún no llega.
-Tal como lo describe, cuesta entender por qué algunos no aceptan. ¿Usted qué piensa?
-La verdad es que no entiendo. La gente que rechaza tendrá sus razones. Pero bueno, tienen su derecho a rechazarlo, aunque no comprendo.
-Quizás sea porque ellos no se dedican al turismo, sino que crían animales, cosechan, y tal vez no les interese hacer otra cosa.
-Claro. Pero salvo dos o tres que hacen una ganadería en escala mayor, tienen el ganado suelto por la zona, porque no hay pastaje. La zona está muy deforestada por sobrecarga de ganado en el terreno. Hasta hace poco era un área natural protegida, entonces no se podía tener ganado ni podía vivir nadie. Entonces se cambió la ley para que puedan ser incluidos y se les pueda dar la propiedad de las tierras. Y van a poder seguir produciendo ganado, pero en pequeña escala, y además mejorar su calidad de vida.