La diputada Victoria Luna destacó que este proyecto “implica un profundo cambio cultural, porque no solo se busca recaudar”, y adelantó que se realizarán audiencias públicas sobre el tema “con el objetivo de escuchar a los ciudadanos y diferentes instituciones y sectores de la sociedad”.
Las audiencias se van a replicar en distintos puntos de la provincia. La primera será el 4 de agosto a las 10 de la mañana en Libertador Gral. San Martín a las 10 horas; a las 17 horas del mismo día, se realizará en San Pedro. El 11 de agosto será en la Quiaca; el 18 en Tilcara y el 25 en Capital y los Valles.
Los legisladores informaron que los ciudadanos interesados en participar pueden enviar sus propuestas por correo electrónico a toleranciaceroenjujuy@hotmail, o presentarlas directamente a los diputados del bloque UCR.
La iniciativa propone que se prohíba manejar a quien haya ingerido “cualquier tipo de sustancia que disminuya sus aptitudes para hacerlo” y la exigencia a someterse a controles de alcoholemia. También sanciona la negativa o la falta de cooperación para realizar la prueba.
Los conductores a los que el test de alcoholemia les dé valores por debajo de los 0,2 gramos de alcohol por litro, deberán pagar una multa de entre 200 y 500 unidades fiscales. Si la persona decide hacer el pago voluntario dentro de los diez días de notificado, recibe un descuento del 50 por ciento.
En el momento del control, se retendrá la licencia de conducir y se permitirá retirar el auto siempre y cuando maneje otra persona, a quien también se le realizará la prueba, que será el único habilitado para conducir por un lapso de cinco horas.
Si la prueba de alcoholemia registra niveles superiores a 0,2 gramos de alcohol por litro de sangre, las multas ascienden serán de 500 a 800 unidades fiscales, sin posibilidad de optar por el pago voluntario.
En este caso también se retendrá la licencia y se le restarán al titular cinco puntos. Pero eso no es todo: podrá ser inhabilitado para conducir por un plazo de dos a seis meses.