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Imputan al alcalde y a su esposa por presunta responsabilidad en la desaparición de los 43 normalistas

El ex alcalde de la ciudad de Ayotzinapa, José Luis Abarca, y su esposa, María de los Ángeles Pineda, fueron acusados como autores intelectuales de las represiones sucedidas en Guerrero, que dejo el saldo trágico de decenas de detenidos, seis muertos y 43 estudiantes normalistas desaparecidos.

En tanto, los padres de las víctimas, reiteraron su exigencia al gobierno federal para que se abra una línea de investigación a fin de determinarse si hubo responsabilidad del Ejército.

Así lo comunicó esta mañana el director de la Agencia de Investigación Criminal, Tomás Zerón, difundió los nuevos cargos contra Abarca y su esposa, presuntos autores intelectuales de las represiones en la ciudad de Guerrero, que terminaron con la muerte de seis personas, decenas de detenidos y 43 estudiantes normalistas desaparecidos.

A su vez, los padres de los jóvenes desaparecidos exigieron al gobierno federal, con los fines de abrir una nueva línea de investigación con la intención de determinar si hubo responsabilidades del Ejército.

Esta mañana el director de la Agencia de Investigación Criminal, Tomás Zerón, difundió los nuevos cargos contra Abarca. Éste, había sido detenido en noviembre pasado. Actualmente está recluido en un penal de alta seguridad, pero por otros delitos.

Hasta ahora, el ex alcalde Abarca estaba acusado de delincuencia organizada, secuestro y homicidio calificado, por el asesinato del líder social Arturo Hernández Cardona, ocurrido en 2013.

Según las autoridades, Abarca y su esposa, María de los Ángeles Pineda, también detenida, fueron los autores intelectuales del ataque perpetrado contra los estudiantes, que dejó seis muertos, 25 heridos y 43 desaparecidos, en una tragedia de repercusión mundial registrada el 26 de septiembre pasado y que mantiene golpeada la gestión del presidente Enrique Peña Nieto.

El caso Ayotzinapa destapó otras muertes y desapariciones ocurridas en los últimos años en la zona de Iguala, 200 kilómetros al sur de la capital. Como parte de las investigaciones se han hallado los cadáveres de otras 30 personas, de las cuales por ahora sólo 12 han sido identificadas. Cinco policías municipales enfrentan órdenes de aprehensión por estas muertes.

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