Los reclamos son por el cese de los despidos y la reincorporación de los despedidos de todos los sectores; por la reapertura de paritarias, atento a la inflación y los tarifazos exigimos un aumento salarial de 42%; también se pide un aumento del piso salarial, que está estancado desde marzo en $7.660, cuando el costo de la canasta básica total ronda los $17.000; además se repudia la criminalización y judicialización de la protesta social; y por el 82% móvil para los jubilados.