La dirigencia de la ITE adelantó que «las medidas van a continuar y se agravarán, porque las condiciones que generan el conflicto se mantienen».
En tanto, entre el miércoles pasado y el de la próxima semana se realizan asambleas en cada sector y lugares de trabajo para debatir la situación actual y organizar la lucha.
En un documento, la ITE recuerda que «se mantiene el incumplimiento de las actas acuerdo del 29 de agosto de 2013 y marzo de 2014, no se avanzó con la desprecarización de los trabajadores en negro ni se cumplió con el pase a planta permanente de quienes tienen dos años de antigüedad como mínimo».
«El otro punto del reclamo es un aumento salarial que se equipare a la inflación y un piso salarial de 9.700 pesos. La Intersindical rechazó el 5 por ciento ofrecido por el Gobierno para el segundo tramo y por pretender cerrar la discusión salarial hasta marzo de 2015, en un contexto inflacionario en el que aumentan constantemente los precios y las tarifas de los servicios públicos», detallan.
La ITE exige equiparar la asignación familiar a los valores nacionales, sin tope y sin tramos, «porque con cada porcentaje de aumento salarial, muchos trabajadores pasan a cobrar menos asignación por traspasar el tope», explican, y precisan: «Actualmente el Gobierno paga 552 pesos por hijo para el tramo 1 (que es hasta 5.860 pesos de sueldo) y 376 pesos para el tramo 2 (para los sueldos de entre 5.861 y 9.800 pesos)».
Otro de los puntos del conflicto son la exigencia del 82 por ciento móvil para los jubilados, eliminación del impuesto a las ganancias y recategorización para todos.