El gobierno provincial creó la Policía Comunitaria, o indígena, destinada a jóvenes de comunidades originarias, que tras su capacitación en el Instituto Superior de Seguridad Pública (ISSP) rabajarán en sus propias localidades. Es la primera fuerza en el país y Latinoamérica con formación en interculturalidad, respeto por la identidad y por los recursos naturales.
En un acto desarrollado en la sede del ISSP, el gobernador Gerardo Morales, junto al ministro de Seguridad Ekel Meyer, especificó que “la Policía Comunitaria cuenta con representantes de las distintas localidades de las cuatro regiones de la Provincia”, y destacó que de esta manera “se rompe con algunas restricciones como la altura, la talla, salvo el tema del examen psicológico que es fundamental, y la capacitación”.
“Decidimos que trabajen específicamente en el lugar de origen, además de la instrucción como fuerzas de seguridad, incluyendo la formación desde el punto de vista pluricultural», precisó, y agregó que «tienen la misión de trabajar y garantizar la seguridad de nuestros recursos naturales y de nuestra cultura”.
Natalia Sarapura, secretaria de Pueblos Indígenas de la Provincia, celebró la creación de esta fuerza: «Se trata de un hecho histórico, ya que el proceso de formación se desarrolla respetando identidad y la institucionalidad de las comunidades”.
“Estos 450 hombres y mujeres han sido elegidos mediante asamblea en sus comunidades, provienen de 250 comunidades de más de diez pueblos indígenas de la provincia”, detalló la funcionaria, y destacó la adecuación de la currícula «basada en la interculturalidad, el respeto a la identidad y a los recursos naturales».