La Convención Nacional de la Unión Cívica Radical (UCR) finalmente decidió este lunes suspender la afiliación partidaria de cuatro de los cinco diputados díscolos que el miércoles pasado acompañaron el veto presidencial de Javier Milei a la ley de movilidad jubilatoria, al menos mientras dure la investigación.
Mariano Campero, Martín Arjol, Luis Picat y Pablo Cervi fueron los legisladores sancionados y apartados del bloque radical.
Lo que reclama la UCR es el cambio del sentido del voto después de la reunión que los implicados tuvieron con el presidente horas antes de la sesión en la Cámara de Diputados.
Además, estarían analizando la situación de Roxana Reyes y Gerardo Cipollini debido a su ausencia en la votación. Distinto es el caso de José Tournier ya que él también se reunió con Milei, pero no está afiliado al partido.
La investigación que se está llevando a cabo se refiere a «fallas en la conducta de los afiliados y dirigentes partidarios de todos los distritos cuando por su investidura lesionen la dignidad del partido». La mesa directiva de la Convención Nacional, que comandan Gastón Manes y Hernán Rossi, decidió dejar en suspenso la afiliación partidaria de los cuatro legisladores.
La votación en la mesa fue de 11 a 1 para elevar al tribunal los 6 casos. El único voto negativo fue de Andrés Lombardi (Mendoza) perteneciente al sector que conduce el gobernador perteneciente a la UCR de Mendoza, Alfredo Cornejo. Por otro lado, con diez votos contra dos se decidió suspender preventivamente a los cuatro que salieron en la foto con Milei.
«Al tratarse el veto presidencial, cuatro Diputados Nacionales afiliados a la Unión Cívica Radical (UCR) e integrantes de nuestro Bloque se apartaron de lo que ellos mismos habían sostenido en la primera votación y acompañaron el veto presidencial, incurriendo en una grave inconducta partidaria, y generando un grave daño a la credibilidad y honor de nuestro partido. Aún más graves fueron los argumentos esgrimidos durante la sesión y en los medios de comunicación, en el sentido de que se habían equivocado en los cálculos, y que su brusco cambio de opinión se fundaba en la necesidad de garantizar el equilibrio fiscal», dice la resolución.
Ahora el Tribunal de Ética del partido deberán definir la sanción final para los diputados radicales. En el tribunal están Alicia Tate de la provincia de Santa Fe, Juan Pedro Tunessi de Buenos Aires y Ricardo Barrios Arrechea de Misiones. Además, desde el partido dijeron que «no están echando a nadie, ellos se han sido solos».