Los procedimientos se realizaron por orden del juez de Control N° 4 Isidoro Cruz y ejecutado por el fiscal de investigación N° 8 Alejandro Bossatti, en el marco de la causa “Pibes Villeros”.
Las hermandas Condori conformaban una cooperatova que integraba la Red de Organizaciones Sociales y se dedicaba a la construcción de viviendas sociales.
El operativo policial fue ordenado por Cruz para dar con el paradero de las tres mujeres, que fueron detenidas e imputadas por los delitos de «fraude a la administración pública” y “extorsión en concurso real».
Los informes investigativos se iniciaron luego de una entrevista de una «extupaquera» de apellido Silisque a una revista de tirada nacional, donde denunciaba que recibía órdenes y supuestas extorsiones por parte de las hermanas Condorí.